jueves, 12 de agosto de 2021

Iatrocidio: la Teoría Microbiana mata y pisotea derechos y libertades


La perversión de la ciencia: una falsa teoría impuesta por el poder es el pretexto para violar derechos y libertades fundamentales y provocar un genocidio iatrogénico


La falsa Teoría Microbiana jamás demostrada pero impuesta sin debate científico desde hace más de un siglo es la base del concepto dominante de salud y por tanto del concepto de salud pública que se utiliza como pretexto en todo el mundo para conculcar derechos y libertades fundamentales, y provocar un genocidio iatrogénico que se extenderá si no lo detenemos a embarazadas, niños y jóvenes.


Compañeros de historia
tomando en cuenta lo implacable
que debe ser la verdad
quisiera preguntar
Me urge tanto
¿Qué debiera decir?
¿Qué fronteras debo respetar?

Silvio Rodríguez




¿Cómo ha sido posible que los gobiernos hayan pisoteado y continúen ignorando y burlándose de todos los derechos fundamentales aprobados en gran parte de los estados de todo el mundo? ¿Cómo es posible que se esté perpetrando un genocidio que comenzó con los ancianos, se ha extendido a toda la población y ahora se va a concentrar en embarazadas, niños y adolescentes en una agresión sin precedentes contra la vida? Y más asombroso aún: ¿Cómo ha sido posible que miles de millones de personas haya aceptado esto sin rechistar e incluso aplaudiendo a sus verdugos y carceleros?

Desde mi punto de vista, para responder a esto hay que abordar una cuestión de fondo y otra más inmediata: la cuestión de fondo y a largo plazo es el proceso de fabricación de ciudadanos obedientes que en algunos artículos he denominado "idiotas", palabra con la que los antiguos helenos designaban a los que no asistían a las asambleas y dejaban las decisiones en manos ajenas. La cuestión inmediata es la denominada Teoría Microbiana de la Enfermedad o Teoría de la Infección. He desarrollado la primera en varios artículos recientes, y aunque habrá que seguir insistiendo y profundizando en ella, quiero ocuparme aquí de la segunda.

No se trata en este caso de desmontar, desmentir, refutar, la Teoría Microbiana de la Enfermedad (TME). Aquí vamos a partir de su falsedad bien establecida en numerosos trabajos cuya lectura recomiendo (ver bibliografía más abajo) y de los que se desprende de forma clara e indudable que nadie la ha demostrado y que no se adoptó tras un debate científico-médico, sino que se impuso por razones de Poder.

Lo que quiero apuntar en este breve texto son las consecuencias de la imposición de esa teoría, sin una pretensión exhaustiva sino más bien de un modo esquemático y con la intención de animar a quienes se sientan sacudidos por estas palabras a profundizar, desarrollar, complementar y en definitiva poner su parte en la lucha contra esta mentira clave que tan crucial y nefando papel juega en el sometimiento de la gente:

La TME ha impuesto una concepción belicista de la biología cuyo producto estrella son los antibióticos, es decir sustancias que bloquean los procesos vitales y matan a los microbios, que son la clave del origen y evolución de la vida y del mantenimiento de la vida misma.

La TME ha provocado un cambio radical en la medicina: hasta la llegada de Louis Pasteur, Robert Koch y otros "cazadores de microbios" la inmensa mayoría de los médicos trataba a sus pacientes de forma individual y artesanal; a partir del triunfo de la TM la minoría de médicos que mantiene esa visión disminuye drásticamente; la inmensa mayoría trabaja de forma industrializada, lo que quiere decir, deshumanizada.

La TME ha trastocado el concepto de enfermedad al culpar de ella fundamentalmente a los microbios, de tal forma que se oculta la relación entre los hábitos y condiciones de vida y los problemas de salud. Además de liberarnos de la responsabilidad en esos problemas se favorece que nos entreguemos a un sistema sanitario corrompido por la industria que nos vende falsos remedios tóxicos contra los cabezas de turco microscópicos a los que cargamos con la culpa.
 
La TME ha impuesto así un concepto de salud basado en la ausencia de enfermedades, en la falsa prevención consistente en adiestrar a nuestras supuestas "defensas" y en el exterminio de los falsos culpables, todo ello con gravísimas consecuencias sobre los procesos vitales y por tanto generador de una auténtica explosión de iatrogenia.

La TME posibilita así que el concepto de salud pública se base fundamentalmente en evitar supuestos contagios lo que conduce inevitablemente a políticas coercitivas basadas en el aislamiento o encierro de personas, control de movimientos, de situaciones que impliquen contacto social, imposición de medidas arbitrariamente consideradas "higiénicas" o llegado el caso, imposición por la fuerza de tratamientos o de medidas supuestamente preventivas, fundamentalmente campañas de vacunación.

La imposición de la Teoría Microbiana es pues un elemento clave en el marco de un proceso de desarrollo del totalitarismo sanitario que culmina con la actual Operación Coronavirus que a su vez se ha convertido de modo traumático y brutal en una especie de reforzamiento definitivo de la propis TME y en una estrategia de Poder eugenista, desatando un Iatrocidio que puede crecer exponencialmente si no hacemos algo definitivo para pararlo.

Ese proceso ha venido marcado por la invasión de la medicina de campos vitales que en principio no le corresponden, y que abarcan el arco completo de la vida y la muerte, jugando un papel clave en la producción de ciudadanos obedientes: la medicalización del embarazo, el parto y la crianza, y la separación de las criaturas creando un trauma que perpetúa el estado de sumisión inconsciente que permite el ejercicio del Poder.

Además, ese proceso se ha visto reforzado por el desprecio de la ética médica, los códigos deontológicos y los acuerdos de bioética a todos los niveles; el control que los Colegios Médicos ejercen sobre los profesionales amenazándolos o tomando represalias contra quienes deciden ser honestos y plantar cara; la omnipotente influencia de la industria farmacéutica, el fundamentalismo científico que corroe la verdadera ciencia; la corrupción de las instituciones cientifico-médicas con la OMS a la cabeza; el control y la manipulación de la información, tanto la especializada en las revistas científicas como la general en los medios de masas presididos por la censura; el abandono total de la responsabilidad y la autonomía del ciudadano de a pie sustituido por una fe ciega en dogmas que no comprende ni quiere comprender en un abismo de deshumanización que lo convierte en un ser esquizoide que lucha contra sí mismo, obedece ordenes absurdas y colabora con un genocidio programado por el Poder.

Negar es decir NO. Decir NO es desobedecer el SÍ del Poder. 
Se niega para vivir. El Poder es la muerte.
Proteger a nuestros hijos y nietos es proteger la vida


PACK NEGACIONISTA BÁSICO

Wilhelm Reich. Psicología de Masas del Fascismo (Roca, 1972).
Ryke Geerd Hamer. El Testamento de la Nueva Medicina (Plural-21).
Máximo Sandín. Pensando la Evolución, pensando la vida (Cauac, 2019).
Enric Costa Vercher. Iatrogenia. La Medicina de la Bestia (Cauac, 2020).
Jesús García Blanca. La Sanidad contra la Salud (iediciones, 2015), Vacunas: una reflexión crítica (co escrito con Enric Costa, iediciones, 2015), Wilhelm Reich, inspirador de rebeldía (Cauac, 2020).
Varios Autores. Discovery DSalud, números 235, marzo 2020 a 250, julio 2021 (por ahora).



18 comentarios:

Unknown dijo...

Muchas felicidades, un excelente estudio, gracias.

Unknown dijo...

Como dice el doctor nadie la bestia parará cuando acabe con su víctima

Bicéfalo dijo...

Buen artículo, buen enfoque. Imagino que las preguntas del inicio son retóricas. Te supongo conocedor de las respuestas de todas y cada una.

Granada 100 dijo...

Maravilloso como siempre Jesús

Unknown dijo...

Sabiendo incluso que la versión que nos imponen es falsa aún así hay tecnología que invalida toda la COVIDIZIA donde no haría falta ninguna restricción de CONFINAMIENTOS MASCARILLA DISTANCIA etc esa tecnología que ya existe son las placas de iones NEGATIVOS con eso no hay escusa incluso con su versión que imponen

Anónimo dijo...

Gracias por el artículo. Es fundamental dar a conocer esta cuestión que es la base de toda la farmafarsa.

Xavier Serrano dijo...

Muchas gracias amigo una vez más por tus acertadas palabras. Hay que recordar la confrontación Becham-Pasteur, y el reconocimiento del propio Pasteur los últimos días de su vida, de su propia teoría microbiana, que su colega Bechamp demostró no ser acertada.
Salud

Anónimo dijo...

Tienes que vivir bajo una roca para pensar que la medicina es tan reduccionista como para intentar culpar a los microorganismos de todas las enfermedades, como bien mencionas en tu texto existe una relación importante entre los hábitos y condiciones de vida y el desarollo de problemas de salud, que jamás ha sido negada y relegada dentro de la medicina. Ahora bien, en el caso de tus ideas respecto al adoctrinamiento y control ejercido a través de una "falsa teoría" microbiológica, lamento mucho que se te haya negado el acceso a educación básica en temas de biología, te invitaría a que intentes leer un poco más acerca del tema.

Juan Gomez dijo...

Todavía no puedo creer que no sé por dónde empezar, me llamo Juan, tengo 36 años, me diagnosticaron herpes genital, perdí toda esperanza en la vida, pero como cualquier otro seguí buscando un cura incluso en Internet y ahí es donde conocí al Dr. Ogala. No podía creerlo al principio, pero también mi conmoción después de la administración de sus medicamentos a base de hierbas. Estoy tan feliz de decir que ahora estoy curado. Necesito compartir este milagro. experiencia, así que les digo a todos los demás con enfermedades de herpes genital, por favor, para una vida mejor y un mejor entorno, póngase en contacto con el Dr. Ogala por correo electrónico: ogalasolutiontemple@gmail.com, también puede llamar o WhatsApp +2348052394128

Anónimo dijo...

Voy a tocar un tema un poco controvertido..., pero real..., mejor no eludirlo..., me acaban de informar de un dato que "creo" ha pasado desaparecido..., la mayor parte de publicaciones pornográficas heteroxesuales..., ¡han desaparecido!, algunas se mantienen en Internet a duras penas..., hay mucha pornografía en Internet, pero de todo tipo..., lo mismo que los anuncios de prostitución heteroxesual.

El dueño de PLAYBOY, Hug Hefner (muerto estos años, en Internet ya no hay ni web y su imperio desmantelado, lo he comprobado...), el dueño de HUSTLER, Larry Flint, lo mismo..., la revista PENTHOUSE tampoco tiene ya ni web, ni papel, cerrada..., la nórdica PRIVATE, lo mismo... (sus ejemplares se venden por Internet para coleccionistas...), de hecho en España hasta INTERVIÚ ¡ha desaparecido! y a Torbe, siempre que pueden lo pasan por prisión....

Todo esto a la vez, parece como si la hetersexualidad estuviera condenada (desde luego en papel ya no queda nada de eso y por Internet, poco..., hay mucho sexo, pero de todo tipo...).

También desaparecieron los vídeos X, y los cines X.

No me había fijado, casi nadie ha reparado en todo esto..., de mucho a nada..., hace tiempo que en las películas normales, los protagonistas (aunque sean hombre y mujer, solo son amigos..., muchas veces es normal que lo sean, pero ¿siempre?).

Podéis comprobar cómo ninguna de estas cosas existe ya en Internet, ni tampoco en los quioscos.

Unknown dijo...

Muchas gracias

Mayre dijo...

Muchas Gracias Jesús por este artículo tan lúcido, gracias por tu dedicación, gracias por tú Fuerza, gracias por tú tiempo y por compartir tus descubrimientos

Anónimo dijo...

Excelente artículo!! Gracias

Anónimo dijo...

Muchísimas gracias por la clase magistral. Una pregunta, ¿alguna razón por la que no se nombran a Kaufman, Cowan, los Bailey, Vollmer, Lindo...?

Anónimo dijo...

No, lo que dice finalmente es que se autofagocitará, que es un gigante con pies de barro

Anónimo dijo...

Me pregunto, si estos médicos tocados por la mano progresista y con subida de 300 euros de sueldo, porque siguen sin atender a los no vacunados ?

Liberfratelo dijo...

... nosotros también te invitamos a que leas algo más ,en temas de biología...como los libros del profesor de biología Máximo Sandin...

Anónimo dijo...

Es latrocinio, no latrocidio