domingo, 29 de diciembre de 2019

Credibilidad cero: la OMS controlada por el poder


El presente texto es un extracto-resumen del artículo La Organización Mundial de la Salud la controla la industria farmacéutica, publicado en el número 228 correspondiente a julio-agosto de 2019 de la revista Discovery DSalud. Puede consultarse íntegramente en el siguiente enlace:


La Organización Mundial de la Salud la controla la industria farmacéutica

Preguntarse quién controla la OMS equivale a preguntar quien controla la salud del planeta ya que las directrices, los programas, las campañas que esta organización internacional pone en marcha cada año afecta directa o indirectamente a la inmensa mayoría de sus habitantes, ya se trate de países considerados “pobres” o de países considerados “ricos”, empezando por los propios conceptos de salud y enfermedad que ya determinan comportamientos y decisiones así como los enfoques médicos que contribuyen a reforzar esos conceptos, establecer las prácticas sanitarias y asentar la visión que la opinión pública tiene de todo ello. En definitiva, la OMS dictamina qué es salud, qué son las enfermedades y cómo hay que actuar ante ellas… o mejor diríamos contra ellas porque ese es el enfoque mayoritario: luchar contra microbios, tumores o síntomas en lugar de proteger la vida.

El presupuesto global de la OMS para el bienio 2018-2019 es de 3.926,97 millones de euros. El dinero para cubrir ese presupuesto procede dos fuentes:

—por una parte, lo que la OMS denomina “contribuciones señaladas” que son las cuotas que paga cada estado miembro y cuyo porcentaje se calcula en base a la riqueza y la población de cada país. En total la OMS tiene 194 estados miembros y 2 asociados. El estado con un porcentaje más alto en su cuota es Estados Unidos, que aporta un 22%. Como ejemplos comparativos, España aporta un 2,4%, Francia un 4,8%, y Alemania un 6,3%. La mayoría de los estados aporta menos del 1%. Como hemos explicado, el total de esas cuotas conforman un 18% del presupuesto global de la OMS.

—la segunda fuente, y la más importante, de financiación de la OMS, lo que la organización denomina “contribuciones voluntarias”, procedentes de organizaciones, empresas y fundaciones filantrópicas que son las que realmente deciden en qué se gasta el dinero y qué programas se ponen en marcha y cuales se quedan en meros proyectos de adorno para los documentos.

Cuáles son esas organizaciones que entregan la mayor parte del dinero:






Conclusión: la OMS no es una entidad pública sino privada, no vela por los intereses del público sino que está financiada y controlada por una serie de donantes privados entre los que destacan la Fundación Gates y la industria farmacéutica así como el gobierno de los Estados Unidos, cuyas agencias de salud están a su vez controladas y financiadas por las farmacéuticas. El dinero aportado por Gates y los laboratorios superan asimismo el total de las cuotas de los socios gubernamentales de la OMS. Por lo que no se puede decir que la principal institución mundial relacionada con la salud sea imparcial, independiente o neutral; más bien todo indica que ha estado y está al servicio de los intereses de esos grupos de poder. Eso significa que las decisiones relevantes sobre salud, enfermedad y medicina no se toman siguiendo criterios científicos o médicos ni buscando objetivos que implementen o mejoren la salud de las personas; se toman en base a criterios y objetivos de los grandes grupos de poder que hemos mostrado y que están a su vez conectados con las élites milmillonarias, bancos, conglomerados empresariales y grandes grupos de comunicación. 


FUENTES:

—Jens Martens and Karolin Seitz. Philanthropic Power and Development: Who shapes the agenda?
https://www.globalpolicy.org/component/content/article/270-general/52829-philanthropic-power-and-development-who-shapes-the-agenda.html.
—Barbara Loe Fisher. WHO, Pharma, Gates & Goverment: Who´s calling the shots?
https://www.nvic.org/nvic-vaccine-news/january-2019/who,-pharma,-gates.aspx.
—Página web de la OMS: https://www.who.int/es.
—Página web de la Bill and Melinda Gates Foundation: www.gatesfoundation.org.
—Página web de GAVI Vaccine Alliance: www.gavi.org.
—Cambio en los criterios de la OMS para pandemias:
https://www.who.int/influenza/resources/documents/pandemic_guidance_04_2009/en/.
—Informe 20 aniversario de Tephinet: https://www.tephinet.org/sites/tephinet/files/content/attachment/2018-08-07/TEPHINET_AnniversaryProfile_EMAIL.pdf.
—Más información sobre los CDC, el EIS y TEPHINET: Jesús García Blanca. La política sanitaria mundial la determina un grupo de agencias estadounidenses. Discovery DSalud, número 128 de junio de 2010 https://www.dsalud.com/reportaje/la-politica-sanitaria-mundial-la-determina-un-grupo-de-agencias-estadounidenses/.



domingo, 22 de diciembre de 2019

MANIFIESTO: Por un mundo sin vacunas


Contra todas las vacunas y a favor de la salud y la vida


1. Las vacunas se basan en una teoría de la enfermedad falsa: la Teoría Microbiana o Teoría de la Infección que provocó una supeditación de la medicina a los intereses de la industria farmacéutica, y que sirvió de excusa para declarar la guerra a los microbios, una guerra que ha resultado ser autodestructiva.

2. Las vacunas no encajan con el funcionamiento de la vida tal y como la han concebido las medicinas tradicionales de todo el mundo y como nos lo muestran descubrimientos recientes -y no tan recientes —pero olvidados, despreciados o directamente atacados— en Biología y en otras ciencias.

3. Las vacunas, por tanto, no tienen sentido biológico, lo cual significa que:

las vacunas no pueden tener ningún efecto positivo: esto explica que las vacunas no hayan acabado con las epidemias o disminuido su incidencia. Los documentos históricos, datos, estadísticas e informes no manipulados disponibles demuestran que la evolución de las enfermedades consideradas “infecciosas” ha dependido de la evolución de las condiciones de vida.

las vacunas solo pueden tener efectos negativos. Más aún: todas las vacunas tienen necesariamente consecuencias negativas para la salud y la vida, que pueden ser más o menos graves e incluso mortales, presentarse a corto, medio o largo plazo, y ser reconocidas legalmente o no, aunque todas ellas estén documentadas con rigor. En especial, es muy urgente investigar y precisar el papel de las vacunas en general en el aumento del número de enfermos y a una edad media cada vez menor, y en particular en la irrupción y proliferación de las llamadas “enfermedades raras”.

4. Las vacunas, como todos los fármacos, están sometidas a la dinámica del poder económico, político y académico. Esto significa que la información oficial que llega a la mayoría de la población a través de los medios de masas es sesgada o falsa, que los procesos de aprobación están condicionados, que las decisiones políticas están influenciadas y que los programas de vacunación, tanto en el mundo llamado “desarrollado” como en los países mal llamados “pobres”, están controlados por grandes poderes que actúan a través de fundaciones falsamente “filantrópicas”, de organismos internacionales financiados y de la institución clave de la medicina industrial moderna: los laboratorios farmacéuticos y, en particular en este caso, los fabricantes de vacunas.

5. Por tanto, el objetivo para quienes estamos a favor de la salud y la vida no puede ser luchar por una “vacunación libre, o por vacunas “seguras” o “eficaces” (ya que toda vacuna es intrínsecamente insegura, imprevisible, ineficaz y peligrosa), sino actuar para erradicar totalmente las vacunas aportando información radical (de raíz) que ayude al mismo tiempo a cambiar los conceptos de enfermedad y de salud, y, en consecuencia, el actual modelo médico y los actuales sistemas sanitarios.

Invitamos a todas aquellas organizaciones o personas que compartan este enfoque (y que todos nosotros, partiendo de haber aceptado inicialmente la versión oficial, llevamos muchos años ampliando con nuestro trabajo, nuestro aprendizaje y nuestra voluntad de compartir información rigurosa y liberadora) a que se sumen a esta iniciativa, a que la apoyen, la difundan y la impulsen según sus posibilidades y su buen hacer.

17 de diciembre, 2019.


GRUPO STOP VACUNAS:

Lluís Botinas, presidente de Plural-21, asociación para el cuidado de la vida en un planeta vivo
Lua Catalá, pediatra
Enric Costa, médico de familia, autor de SIDA: Juicio a un virus inocente y Iatrogenia: la medicina de la Bestia, y co autor de Vacunas: una reflexión crítica.
Jesús García, investigador social, colaborador desde 2009 de Discovery DSalud, autor de La Sanidad contra la Salud y Wilhelm Reich, inspirador de rebeldía y co autor de Vacunas: una reflexión crítica.
Teresa Morera, naturópata y ex farmacéutica.
Abraham Navarro, antropólogo y coeditor de Cauac Editorial Nativa.
Alicia Ninou, periodista independiente.

Más información sobre STOP VACUNAS:

Colabora firmando el Manifiesto y difundiéndolo.
Participa en el debate abierto en facebook.

Vacunas: una reflexión crítica a partir de la historia de la medicina 
y los nuevos descubrimientos de la biología.

Otro libros de los integrantes del grupo:
-- Enric Costa. Iatrogenia: la medicina de la Bestia.
-- Libros de Jesús García en Amazon.
-- Lua Catalá. Pediatría para los nuevos niños.

Artículos sobre vacunas en Discovery DSalud:

viernes, 15 de noviembre de 2019

Entrevista y presentación: Vacunas y Iatrogenia

Estoy concentrado en acabar un libro sobre (contra) los antibióticos y he descuidado un poco este blog. Anoto aquí de modo sucinto algunas cosas que pertenecen al ámbito de la salud y el poder y que no he tenido tiempo o energía para ir desarrollando en su momento.


En julio, me entrevistó Vórtice Radio para hablar de (contra) las vacunas. La entrevista acaba de aparecer (como aparecen las cosas en Internet) en el blog de Vórtice y estamos difundiéndola y comentándola para llegar a la mayor cantidad posible de gente. Puede escucharse aquí:


ARTÍCULOS Y ENTREVISTAS

Entretanto he ido escribiendo algunos artículos para Discovery DSalud:

--Número 207/Septiembre 2017: Italia: pretenden obligar a los menores de 17 años a inocularse 10 vacunas!
--Número 208/Octubre 2017: Manifiesto por una Ciencia Postmaterialista.
Número 209/Noviembre 2017: Las emociones y pensamientos también determinan la salud del organismo.
--Número 210/Diciembre 2017: Jesús García Blanca: "A quienes se oponen a las verdades oficiales se les difama y persigue siembre". Entrevista que me hizo la revista con motivo de la publicación de mi libro sobre Wilhelm Reich.
--Número 211/Enero 2018: ¿Sabe usted s come animales transgénicos?
--Número 212/Febrero 2018: El Ministerio de Sanidad ningunea a las asociaciones de consumidores.
--Número 213/Marzo 2018: ¿Se debieron los casos de microcefalia en Brasil a un programa de ultrasonidos encubierto?
--Número 214/Abril 2018: SaludSinBulos: ¿nuevo intento de cesura disfrazada?
--Número 215/Mayo 2018: Diego Bárcena: "Haría falta un nuevo organismos de la ONU específicamente dedicado a la bioseguridad".
--Número 217/Julio-Agosto 2018: ¿Se manifiesta la conciencia a través de las neuronas cerebrales?
--Número 218/Septiembre 2018: La unión europea anuncia iniciativas contra los "antivacunas".
--Número 219/Octubre 2018: Muchos de los productos elaborados para bebés y niños son insanos.
--Número 222/Enero 2109: ¿Qué se esconde tras la agricultura personalizada?
--Número 223/Febrero 2019: Es falso que existan imágenes reales del VIH, presunto responsable del SIDA.
--Número 224/Marzo 2019: Anne Katharina Zschocke: "Las bacterias son nuestras compañeras".
--Número 225/Abril 2019: Los peligrosos efectos de las vacunas que no aparecen en los prospectos.
--Número 226/Mayor 2019: Albert Salvadó: "El cáncer no mata; mata la ignorancia, Y el conocimiento es vida".
--Número 227/Junio 2019: Gran parte de las enfermedades las provocan los tratamientos médicos. Entrevista con Enric Costa sobre con motivo de la publicación de su libro sobre Iatrogenia.
El abuso de antibióticos perjudica el tratamiento con células madre.
--Número 228/Julio 2019: La Organiación Mundial de la Salud la controlan grupos privados.
--Número 229/Septiembre 2019: Dos conceptos de salud: holismo frente a mecanicismo.
--Número 232/Diciembre 2019: Entrevista a Xaveiro; Una retrospectiva del Dr. Hinohara.


LA MEDICINA DE LA BESTIA

Mi amigo y compañero de lucha, Enric Costa, uno de los pocos médicos tradicionales y honestos que conozco, presentó su libro "Iatrogenia: la medicina de La Bestia. El origen de las enfermedades raras" en Murcia, el pasado noviembre, en un acto coorganizado por Cauac (que pronto publicará una edición corregida y renovada del libro) y el Ateneo Huertano Los Pajaros. Puede escucharse aquí:









martes, 30 de julio de 2019

No soy médico ni periodista

ACLARACIÓN IMPORTANTE

Debido a los muchos amigos o conocidos o simplemente personas que leen mis artículos y libros o escuchan mis conferencias y se dirigen a mí como doctor o periodista, y por si ha aparecido así en cualquier reseña sobre mis escritos o en cualquier otro lugar que pueda mover a confusión, quiero aclarar públicamente que no soy doctor, ni médico, ni periodista; es decir, no tengo la titulación oficial que corresponde a esas dos profesiones.



Eso sí, llevo muchos años -aproximadamente desde 1990- escribiendo en medios de comunicación y colaborando con revistas, al principio sobre temas sociales en general y posteriormente, desde hace unos diez años, especializándome en temas de educación, salud y ecología, lo que supone obviamente una práctica intensa y continuada como escritor e investigador social, y también mucho tiempo y energía dedicados a estudiar todas las materias y disciplinas que tienen relación con la salud: historia de la medicina, biología, inmunología, microbiología, psicología social, sociología, filosofía, pedagogía... y muchas más cosas que no encajan en etiquetas al uso; todo ello siempre desde el mayor rigor posible y con un enfoque crítico, solidario, plural y holístico.

Jesús García Blanca

viernes, 17 de mayo de 2019

¿"Pseudoterapias" o Pseudoperiodismo? (Entrevista a Jesús García Blanca)

Hace unos días, estudiantes de periodismo de la Universidad Carlos III de Madrid me entrevistaron como parte de la documentación que reunían para la elaboración de un trabajo sobre la difusión de "pseudoterapias" en los medios de comunicación, centrándose especialmente en la homeopatía.

No me está permitido difundir el contenido del trabajo aunque, con permiso expreso de sus autoras, sí que puedo compartir públicamente la entrevista que me hicieron por lo que pueda aportar al debate en marcha sobre las mal llamadas "pseudoterapias" y en la que puntualizo algunas cuestiones básicas que me parecen de interés de cara al tratamiento de estas noticias por los medios de comunicación.



ENTREVISTA:


Preguntas sobre la difusión de información 
científica/pseudocientífica en los medios de comunicación:

¿Por qué es necesario el periodismo científico?

Entiendo que el tema específico de esta entrevista es el tratamiento periodístico de la homeopatía y que por tanto cuando me pregunta sobre “periodismo científico” no estamos hablando tanto de ciencia en general o de ciencias como la astronomía o la geofísica, sino de ciencias en el ámbito de la salud. En ese sentido me gustaría dejar claro desde el principio que yo no creo que la salud pueda abarcarla la medicina –cualquier clase de medicina- ni la ciencia, sino que se trata de algo mucho más complejo que debe abordarse desde múltiples disciplinas y enfoques.

En relación con esto y sin pretender extenderme, es preciso aclarar también que la ciencia –entendiendo aquí, claro, que hablamos de la ciencia moderna occidental- es una herramienta de conocimiento pero no la única ni la más completa o compleja. El problema de fondo en el tema que nos ocupa es que ciertas personas y colectivos pretenden imponerla como única via posible de conocimiento, de modo que, para ellos, aquello que la ciencia no puede conocer simplemente no existe o se considera superstición, religión, magia, esoterismo o simplemente estafa. Por supuesto estos colectivos o personas no solo son fanáticos que el profesor Emmanuel Lizcano denomina “fundamentalistas científicos”, sino que no tienen ni idea de lo que es la superstición, la religión, la magia ni el esoterismo. 

Una segunda aclaración, en este caso sobre el periodismo y sobre mi mirada a la sociedad en la que estamos inmersos: todo en ella está de un modo u otro, en mayor o menor medida condicionado por relaciones de poder. Sin ánimo de ponerme a desarrollar esto que no es el propósito de esta entrevista, sí diré de modo casi telegramático que lo que hace falta es periodismo científico –y no científico- independiente, crítico y honesto, tanto como hace falta que la investigación científica y la formación científica sean independientes, críticas y honestas.

Aclarado esto, la respuesta se hace más fácil, casi evidente: es necesario el periodismo científico con las características que le he citado para ser conscientes de esas relaciones de poder y para combatirlas, puesto que la información crítica, el conocimiento crítico y el pensamiento crítico suponen un mayor margen de libertad y de felicidad. Esto, que vale para cualquier cosa en la que pensemos, en el terreno de la salud llega a convertirse en vital, incluso en literalmente vital ya que un enfoque u otro, una decisión u otra sobre nuestras vidas o las de nuestros hijos pueden significar la diferencia entre la salud y la enfermedad, la vida y la muerte. Y por si no ha quedado suficientemente claro, añadiré que, en general, el poder es el lado de la enfermedad y la muerte, y la oposición al poder, en la medida en que sea posible, es el lado de la salud y la vida.




¿Considera que la divulgación científica solo deben realizarla expertos científicos? ¿Por qué?

Creo que la divulgación científica crítica deben realizarla los expertos en divulgación crítica. Pero como sigo pensando que aquí hablamos de salud, esos expertos divulgadores deberán tener conocimientos de múltiples disciplinas y enfoques que atañen a la salud y por supuesto no pueden ser “expertos” en todo, pero es que la divulgación no es una tarea especializada sino todo lo contrario: se trata de acercar al gran público conocimientos que no pueden o no va a adquirir leyendo publicaciones especializadas. El punto clave aquí nuevamente es el poder, por eso insisto en “divulgación crítica”, porque la divulgación a secas ya sabemos lo que es: divulgación de lo que interesa al poder.

¿Cómo debe ser la comunicación científica para que la divulgación sea efectiva?

Siguiendo con el enfoque que he propuesto desde el principio, “efectiva” significa para mí que consiga que el gran público se replantee conocimientos, revise creencias, se pregunte cosas, encuentre nuevos caminos... y en definitiva, que se fomente el pensamiento crítico que capacite para tomar decisiones libres y fundamentadas. Lo que está muy claro es que la divulgación dirigida, controlada o influenciada por el poder no va a servir para eso, sino para que la gente continúe creyendo lo que interesa al poder, aceptando lo que le llega desde las instituciones del poder u otras controladas por él, e incluso defendiéndolo frente a las minorías críticas. Esto último sería “efectivo”, pero para los intereses del poder, no para los de la gente.

¿Los medios combaten la homeopatía o contribuyen a difundirla? 

Aplicando una vez más el enfoque de las relaciones de poder, es fácil comprender que los grandes medios, por el hecho de pertenecer a los grupos de poder y defender sus intereses no pueden hacer otra cosa que combatir la homeopatía; otra cosa es discutir si con esos ataques contribuyen igualmente a difundirla y en qué medida. Por otra parte, muchos medios no tan grandes y que se presentan como independientes y llevan a cabo un encomiable trabajo crítico en terrenos como la política o la economía, se han alineado en los temas de salud y medicina con los intereses del poder. De modo que solo puede esperarse algo de información crítica o simplemente respetuosa con disciplinas como la homeopatía en un reducido número de medios, fundamentalmente digitales y especializados en temas de salud holística o alternativa.




¿Qué tratamiento deberían darle los medios de comunicación a la homeopatía?

Vivimos en el mundo que vivimos. Eso significa reconocer que los grandes medios dan a los temas el tratamiento que su línea editorial exige en función de los intereses de los grupos de poder a los que pertenecen. No hay más que leer los libros de Pascual Serrano sobre el tema para conocer con pelos y señales lo que la mayoría sospecha o intuye. En este contexto, solo cabe hacer uso de los medios alternativos o de contrainformación para que la gente pueda disponer de información crítica y llegar a sus propias conclusiones. Esa es la labor que procuro hacer desde hace años en diferentes planos y sobre temas más o menos relacionados con la salud, la medicina o la ecología. Por supuesto que enfrentarse a la influencia de los grandes medios es una labor muy dura e ingrata, pero al menos duermo con la conciencia tranquila.

¿Quiénes considera que son los responsables de la mala fama de la homeopatía?

Los ataques contra la homeopatía comenzaron hace más de un siglo en Estados Unidos cuando la medicina “alopática” o moderna se dio cuenta de que podían perder protagonismos y comenzaron a organizarse fundando la Asociación Médica Americana y otras organizaciones. Esto es una nueva versión de aquellos ataques pero adaptado a los tiempos.

¿Se encuentra con dificultades o reticencias a la hora de publicar un artículo que esté a favor de la homeopatía?

Personalmente no encuentro dificultades ni reticencias para escribir lo que quiero, pero eso es porque trabajo para medios independientes, críticos y honestos, que son las características que vengo repitiendo. Estoy prácticamente seguro de que ninguno de los grandes medios o incluso de los pequeños a los que he aludido antes publicaría las cosas que escribo sobre salud y medicina. Y añadiría que mis planteamientos, por ser radicales –en el sentido de que van a la raíz- se verían (y de hecho se han visto alguna vez) en apuros para aparecer en medios especializados en salud alternativa debido a la “caza de brujas” que se ha desatado en este terreno.

¿Cree que lo que difunden los personajes públicos tiene más impacto que lo que podrían difundir los profesionales de la información?

Creo que sobre todo suelen ser impactos de mucha intensidad inicial pero de corto recorrido. Claro que hay una diferencia: si lo que publicitan estos personajes públicos son consignas del poder, se verán reforzadas.




Preguntas sobre el interés 
científico de la sociedad:

¿Considera que la sociedad tiene el suficiente interés científico? ¿Por qué?

Como Ernesto Sabato, creo que la gente de a pie cree más en la ciencia cuanto menos entiende los conceptos científicos. Eso, junto con la reducción de lo científico a lo tecnológico y por tanto a las aplicaciones prácticas, hace que la ciencia se haya instalado en un lugar privilegiado que a su vez es utilizado por el Poder como discurso de legitimación, especialmente en el terreno de la medicina. De ahí la insistencia en hablar de “medicina científica”, como si ese adjetivo fuese un aval absoluto.

¿Qué pueden hacer los medios para fomentar el interés científico de la sociedad?
¿Cuál cree que es el papel de los medios de comunicación en la educación científica de la sociedad?


Creo que estas dos preguntas se responden solas repasando lo que he dicho antes sobre los medios y las relaciones de poder: en tanto que herramientas de poder, los grandes medios van a explotar y legitimar el discurso de la ciencia como metadiscurso de poder, mientras que, por el otro lado, los medios de contrainformación tendrán que decidir si apoyan ese discurso en el terreno de la salud-medicina o, como hacen en otros terrenos –economía, política, ecología, género- se oponen al discurso del poder y plantean un contradiscurso que pueda ayudar a la gente a escapar de la trampa de la medicina moderna farmacológica, responsable de la mayor catástrofe iatrogénica que conocemos.





REFERENCIA:

Título del trabajo: La difusión de pseudoterapias en los medios de comunicación: el caso de la homeopatía en El País Semana, La Ventana y El Programa de Ana Rosa entre 2016 y 2018.
Autoras: Alicia Calvo Hernández, Carla Colmenero Rodríguez, Ana María Criado Calvo y María Agustina Gómez Reggiani. 3º Periodismo y Humanidades. Grupo 61.


jueves, 11 de abril de 2019

Wilhelm Reich, un himno a la libertad


Casi simultáneamente con la publicación de la traducción italiana de mi libro sobre Reich, el grupo editorial Macro dedicó un dossier especial a Reich en su revista Scienza Conoscenza para el que me pidieron un texto especial que relatara cómo decidí escribir un libro sobre el descubridor de la energía orgónica. Reproduzco aquí la versión en castellano de ese texto.


Reich llegó a mis manos por primera vez allá por 1977. Se trataba del libro La función del orgasmo. El descubrimiento del orgón, publicado en España por la Editorial Paidos en su Biblioteca de Psicología Profunda. Aquel libro -que aún reposa protegido por un forro de plástico en mi biblioteca- me fascinó. Entendí muy poco, pero aquella mezcla de reportaje científico, diario vital y crítica filosófica me dejó atrapado y me impulsó a seguir leyendo lo que pude encontrar de su autor.

La lectura de su obra me impulsó a recorrer una multitud de caminos en los campos de la educación, la ecología y la salud, que con los años determinaron mi actividad como escritor de investigación. Reich me condujo a Neill y su carismática visión de la educación que me impulsó en su día a estudiar magisterio y que inspiró la forma en que me he relacionado con mis hijos. Y no solo eso, le debo a Reich mi aproximación crítica a la realidad, mi rebeldía y el cuestionamiento sin concesiones de la autoridad.

Y aquí estoy, cuarenta años después, procurando compartir lo que he aprendido y conseguir que este personaje excepcional logre hechizar a la mayor cantidad de gente posible. Con ese ánimo me decidí a escribir un libro que reuniera dos características básicas: que respetara al máximo las ideas y los descubrimientos de Reich con el rigor que él siempre se exigió en sus investigaciones, y que fuera accesible para personas sin formación especializada en las materias que Reich abordó.

UN LIBRO RIGUROSO Y DIDÁCTICO

Con esos objetivos me planteé un libro con tres partes bien diferenciadas en cuanto a tono, contenido y tratamiento. Una primera parte para contar la historia de Reich, en un tono novelístico que trasmite todo el dramatismo de su peripecia vital a partir de las biografías ya publicadas y de los diarios y la autobiografía del propio Reich.

En la segunda parte hago un recorrido por lo que denomino doce descubrimientos que hubieran podido cambiar el mundo... y que de hecho pueden cambiarlo si conseguimos que se abran paso entre la maraña de relaciones de poder que obstaculizan el acceso a conocimientos vitales. Cada uno de estos descubrimientos va enlazado con un itinerario de lectura que permite acceder a la obra clave de Reich y a otros libros suyos o de otros autores que profundizan en ese tema concreto.
Por último, en la tercera parte explico cual ha sido el destino del archivo de Wilhelm Reich con todo su legado intelectual, científico y humano, así como la influencia que ha tenido su obra a nivel internacional en las disciplinas en las que hizo aportaciones relevantes e incluso trascendentales: psicoterapia, psicología social, educación, medicina, microbiología, biología, ecología y muchas más.

ORGÓN: LA ENERGÍA PRIMORDIAL

Desde que comenzó sus estudios de medicina, Reich se sintió atraído por la sexualidad y el psicoanálisis y desde el principio se esforzó en plantear los trastornos y el sufrimiento de sus pacientes en términos de energía, traduciendo a una fórmula de economía energética la salud y la enfermedad, la capacidad de sentir placer o la incapacidad que se traduce en angustia debido a las defensas que la persona levantó para protegerse primero del exterior y después de sí mismo y a las que Reich denominó "coraza".

Pero Reich consideraba que los problemas no provenían de la estructura humana sino del entorno social; en otras palabras, lo que había que "curar" no era a las personas sino a una sociedad autoritaria y represora que los enfermaba. De ahí que se convirtiera en un pionero de la psicología social y planteara muy pronto cambios radicales en la forma de concebir, parir y criar a las criaturas basándose en el respeto de la autorregulación de sus impulsos y necesidades.

Huyendo de la `persecución del nazismo recorrió varios países europeos y se estableció un tiempo en Noruega donde llevó a cabo experimentos con bioelectricidad y cruzó la frontera de la biología descubriendo los fundamentos de la formación de materia viva, lo que le condujo a su descubrimiento más importante y clave de su obra posterior: la energía vital cósmica que denominó orgón.
La energía orgónica era la energía de las antiguas tradiciones, la líbido que Freud concebía de un modo casi metafórico y la fuerza de la que venían hablando las corrientes vitalistas desde hacía siglos. Reich consiguió hacerla visible y describir sus propiedades: libre de masa, presente en todas partes, en constante movimiento, puede manipularse y controlarse mediante dispositivos especiales, constituye el medio en el que se producen los fenómenos electromagnéticos y gravitacionales, forma unidades de funcionamiento tanto vivas como no vivas y es anterior a la materia que se crea a partir de ella.

Este descubrimiento lo llevó a reformular toda su teoría psicoanalítica y psicosocial y avanzar abriendo puertas insospechadas para mostrarnos las relaciones ocultas entre fenómenos aparentemente inexplicables y dispersos: las neurosis, el masoquismo, la escisión esquizofrénica, la maldad humana, la violencia, la indolencia de las masas, su abandono en manos de líderes autoritarios, la represión de la sexualidad, el maltrato a las criaturas, la educación coercitiva, el origen de la vida, los interrogantes del cáncer, los fenómenos atmosféricos, el comportamiento de los tornados o la formación de las galaxias.

CAMBIAR LA SOCIEDAD

Desgraciadamente, su honestidad provocó su trágico final: por una parte su coherencia científica y moral que lo impulsó a no detenerse jamás; por otro, fue víctima de la lógica destructiva que había cartografiado y que denominó plaga emocional, una biopatía crónica que se implanta en el ser humano desde que nace y que se manifiesta tanto a nivel individual como social pudiendo adquirir las proporciones de una pandemia, como es el caso de la Inquisición en los siglos XV al XVII o el fascismo de los años treinta del siglo XX.

Y es que todos los descubrimientos de Reich ponen en cuestión o atacan directamente las bases del sistema, y, más allá, aportan herramientas para enfrentarnos a él, argumentos para la desobediencia, conocimientos para la rebeldía.

De hecho, Reich predijo con impasible serenidad lo que iba a sucederle debido a las reacciones de la plaga contra lo viviente y contra quienes -como el propio Reich- pusieran en evidencia esas reacciones y sacaran a la luz los fundamentos de las funciones naturales del vivir. Los continuos y violentos ataques de la plaga hasta acabar con su vida demostraron efectivamente el descubrimiento social más dramático de Reich: como individuos acorazados, aislados de la naturaleza, aterrorizados de sus propios deseos, atrapados por la ira ante su impotencia, desatan el infierno de la envidia, de la difamación, de la represión contra la espontaneidad, la honestidad, la salud, la racionalidad y la verdad conectada con la naturaleza.

Son los mismos que en todas las épocas separan a los bebés recién nacidos de sus madres, los mismos que castran sus impulsos sexuales y amorosos, los mismos que destruyen su creatividad, los mismos que reaccionan con indiferencia al llanto de un bebé... son los que difaman, persiguen, queman en las hogueras reales o simbólicas a los investigadores honestos y sirven como brazos ejecutores contra la verdad al servicio de los poderes que llevan demasiado tiempo controlando el mundo.

CRIANDO A LOS NIÑOS DEL FUTURO

Frente a esos brazos ejecutores que atentan contra la vida, debemos recuperar nuestra parte animal, la que nos conecta con los ritmos naturales, con los flujos de energía, la espontaneidad y, en definitiva, con lo vivo. Reich estableció con precisión el papel de la familia patriarcal autoritaria que niega o reprime la sexualidad infantil y adolescente perturbando los flujos energético y provocando disfunciones físicas, mentales o emocionales; una labor complementada cada vez a más temprana edad por sistemas educativos basados en la disciplina, el castigo y la autoridad, la medicalización del embarazo y el parto -arrebatados a la intimidad y la sexualidad de las mujeres- y una crianza presidida por la separación de la diada madre-bebé, la imposición de protocolos médicos y el empeño en que los bebés se acostumbren, se plieguen, se amolden, se sometan de modo que los adultos acorazados satisfagan sus frustraciones y su miedo a lo vital y espontáneo y que ha dado como resultado una sociedad enferma e incapacitada para abandonarse a las emociones, a la libertad y a una sexualidad sana.

Para ello, Reich nos señaló una responsabilidad inexorable: criar a nuestros hijos en esa "tierra de nadie" entre el presente acorazado y el futuro regido por las leyes de la naturaleza; una responsabilidad que recae sobre quienes vivimos en la confusión, rodeados por la plaga, cuestionados por ese orden social que él combatió hasta su muerte.

La tarea es por tanto proteger a nuestras criaturas de la plaga emocional, construir un refugio con las herramientas que Reich nos dejó: contactar con nuestro lado salvaje para que los cachorros humanos se mantengan a salvo en su ecosistema primario: el cuerpo de la madre conectados primero a través del cordón umbilical y luego en el exterior por ese otro cordón que es la leche materna, el contacto piel con piel, la conexión orgonótica, la mirada, las caricias, el pezón vivo.

Posibilitar la autorregulación no consiste en seguir un conjunto de normas, una técnica artificiosa ni un proceso intelectual, sino justo lo contrario: implica buscar las grietas en nuestra propia coraza para comunicarnos con nuestras crías y entender que deben seguir su propio camino. Supone un doble sufrimiento: el de abrir nuestras heridas, que tanto nos costó cicatrizar, y el de aprender a soportar la libertad y la capacidad de decidir su destino de esos hijos que quisiéramos poseer para siempre pero que "son hijos e hijas de la vida, deseosa de sí misma" -unas palabras que podría haber escrito Reich, pero que escribió en 1923 el poeta libanés Jalil Yibran.

Artículo escrito para la revista Scienza e Conoscenza
Traducido por Valerio Pignata y publicado en el número 67, marzo 2019.


MÁS INFORMACIÓN:

Libro Wilhelm Reich, inspirador de rebeldía (Murcia, Cauac Editorial Nativa, 2018)
Edición italiana Wilhelm Reich, il genio dell'energia orgonica e della liberazione sessuale (Cesena, Macroedizioni, 2018).