Ninguno de mis libros de investigación me ha causado tanta emoción, ninguno ha supuesto un destilado energético tan enorme al escribirlo ni me ha provocado una resaca emocional tan intensa, ni me ha conmocionado tanto con la responsabilidad que supone ofrecerlo a la gente, ni me ha sobrecogido tanto al redactar mis reflexiones que conectan tan íntimamente con mi vida, mis sueños, mis amores y mis esperanzas.
Mirándolo ahí, en la caja de cartón en la que acaban de llegar los ejemplares de la editorial, con esa desafiante sobriedad, con esos tonos sutiles de sombras y luces que hablan de las contradicciones vitales, encontrándome sin excusas con esa mirada intensa de Willy que parece -o quiero yo pensar que parece- decirme: no está mal... has hecho tu parte, has estado a la altura de una responsabilidad que va mucho más allá de ti, que es social, que es de la comunidad, que es de todos los que se sienten vivos y quieren que la vida salga adelante sin trabas, encarnada en cada criatura... las palabras de quien ha sido y será para siempre mi inspirador de rebeldía.
El libro en Cauac
jueves, 14 de diciembre de 2017
viernes, 3 de noviembre de 2017
Wilhelm Reich, inspirador de rebeldía
3 de noviembre de 2017…
Se cumplen hoy 60 años de la muerte de Wilhelm Reich, uno de
los nombres más significativos de lo que a algunos nos gusta llamar “la
revolución de la consciencia”. Para muchos su nombre puede ser desconocido o
bien una referencia difusa y enigmática, y sin embargo al rastrear sus huellas
no podemos dejar de percatarnos del alcance colosal que ha tenido como fuente
de inspiración de innumerables visiones y proyectos que a día de hoy laten muy
vivos, en relación con la salud, las terapias, la educación, la ciencia y
prácticamente todo el espectro de las inquietudes humanas.
En todos ellos reconocemos inconfundibles denominadores
comunes: de alguna manera transgreden o trascienden las estructuras de la
cultura institucionalizada de la modernidad (que quizás mejor podríamos llamar
“subcultura”, en la medida en que favorece más el empobrecimiento espiritual
del individuo que su crecimiento). Confían en la soberanía natural de lo
orgánico, lo vivo, lo que tiene movimiento propio, y ponen en evidencia a lo
que no confía y no respeta. Gravitan en torno a lo vivencial y empírico
siguiendo, conscientemente o no, la premisa de que sólo desde una relación
directa, implicada y honesta se puede amar y, sólo amando emerge el verdadero
conocimiento. Sí, Reich fue un auténtico revolucionario de la consciencia.
El legado reichiano ha sido tan profuso, creativo y
expansivo, y a la vez tan solapado en el imaginario consciente colectivo, que
por lo general se hace poco asequible el componer apenas algún retazo claro de
lo que realmente fue su vida y su obra, las cuales a menudo nos llegan de forma
borrosa y casi fantasmagórica.
Por ello, el autor del próximo libro que vamos a
publicar, Jesús García Blanca, se propuso hace ya algún tiempo
materializar un trabajo para acercarnos al Reich “real” desde un enfoque
gratamente novedoso que se compone de tres partes: una primera narrativa,
en la que recorremos a vuelo de pájaro la emocionante e intensa vida de Reich.
La segunda, una guía útil y eminentemente práctica sobre su obra, sus
aportaciones científicas y la originalidad de su pensamiento.
Y por último una
somera muestra de la actualidad de su legado cultural y los recursos disponibles
para continuar profundizando en las diversas facetas del mismo, que incluye
también colaboraciones de varios autores e investigadores vinculados a una u
otra. Las tres partes se presentan sin que nos sobre una coma, de forma
sintética, respetuosa y alejada de juicios de valor, conclusiones personales y
desarrollos apasionados de sus teorías.
Hoy el libro está felizmente acabado y en estos momentos
cocinándose en la sala de máquinas para ver muy prontito la luz, lo cual nos
complace anunciar en este día, conmemorando el aniversario y honrando a un gran
genio inspirador que amó con suficiente intensidad como para romper las
barreras que aprisionan la consciencia. Un saludo a todos los que leen y
deseando que este trabajo pueda serles de ayuda, por todas nuestras relaciones.
Fuente: http://cauac.org/uncategorized/wilhelm-reich-inspirador-de-rebeldia/
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Cauac Editorial Nativa,
Wilhelm Reich
sábado, 14 de octubre de 2017
¿Son necesarias las vacunas?
En el contexto de las multitudinarias protestas ciudadanas contra la ley que ha convertido en obligatorias once vacunas para todos los niños italianos, mi editor en Italia me propuso escribir junto al Dr. Enric Costa un artículo especial para publicar en la revista Scienza e Conoscenza. Comparto aquí el texto completo en castellano.
¿Son necesarias las vacunas?
No cabe duda que estamos ante
una oleada de autoritarismo y desprecio de los derechos fundamentales
consagrados en las constituciones de toda Europa. Administrar fármacos -vacunas
incluidas- de modo forzoso con amenazas de multas e incluso retirada de la custodia
de los hijos es una acción gravísima que viola derechos constitucionales
nacionales, acuerdos europeos y tratados internacionales.
Es fácil comprender que sería absurdo obligar por ley a
adoptar prácticas saludables por mucho que estas estén suficientemente probadas
y aceptadas mayoritariamente: ¿nos parecería razonable obligar a todo el mundo
a hacer media hora de ejercicio diario? ¿a seguir estrictos regímenes
alimenticios? ¿nos parecería razonable prohibir la venta y el consumo de
tabaco? ¿Por qué entonces las leyes y decretos que obligan a vacunar a nuestros
hijos parecen tan razonables a algunos, probablemente a muchos?
Pues bien, ante el
alarmante interés que están demostrando muchos políticos en Europa para obligar
a la población al consumo de vacunas industriales bajo el peso de la ley, los
ciudadanos y médicos que no nos vacunamos queremos reclamar nuestro derecho a
ser dueños de nuestra vida individual; un derecho reconocido en todas las
constituciones de los países democráticos y que los distingue de los países
totalitarios y dictaduras.
Pero por si esto no
fuese suficiente, invitaríamos a estos políticos a que se hicieran la siguiente
reflexión: Hace unos 60 años que existen las vacunaciones masivas;
anteriormente solo se administraron a población reclusa, a huérfanos y a la
soldadesca, hasta que en los años 50 y 60 empezaron a masificarse y a vacunar a
casi toda la población infantil; por tanto cabe preguntarse… si son tan
indispensables las vacunas como para hacerlas obligatorias… ¿cómo ha podido
sobrevivir la humanidad durante cientos de miles de años… sin vacunas ni
antibióticos?
Si al reflexionar
sobre esa realidad histórica no llegan a la conclusión de que las vacunas no
parecen ser tan necesarias como las presentan, queremos informar al lector que
algunos médicos pensamos que las vacunas no solamente no son necesarias sino
que, además, carecen del más mínimo sentido biológico; y por carecer de sentido
biológico pueden ser y, de hecho, lo son, peligrosas para la salud… ¿por qué decimos
que no tienen sentido biológico las vacunas?... pues porque son una
consecuencia de una teoría médica
propia del siglo XIX que ha quedado totalmente
obsoleta y superada por los propios avances en microbiología que se han
producido en el siglo XX.
LA TEORÍA DE LA INFECCIÓN
CONTRA
EL NUEVO CONCEPTO DE
MICROBIOMA
Como hemos dicho, la teoría de
la infección también denominada teoría
microbiana de la enfermedad, nació en el último tercio del siglo XIX y fue
como consecuencia de la aplicación de los primeros microscopios en medicina;
con ellos se hicieron visibles unas formas de vida diminutas y hasta entonces
invisibles: los microbios.
Ese hallazgo dividió
a la clase médica en dos grandes grupos: El
primero de ellos lo formaron la
mayoría de médicos de la época que pensaron que el microscopio no los había
creado sino tan solo hecho visibles y que, por tanto, si los microbios estaban
ahí, en nuestra piel, nuestra boca y nuestro intestino…sería por algo. Puesto
que hasta la fecha habían pasado desapercibidos… quizá cumplían alguna misión
que desconocíamos. En todo caso sería prudente esperar y observar. Este primer
grupo de médicos dio muestras, con su actitud, de poseer virtudes propias del
rigor científico: prudencia para afirmar novedades y paciente observación hasta
recabar suficiente información para saber lo que realmente es aquello que se
quiere conocer.
El segundo grupo de médicos fue capitaneado
por un industrial que no era médico, el conocido Louis Pasteur, y desde el
primer avistamiento de los microbios afirmaron que producían enfermedades y que
esos nuevos invitados eran peligrosos y que había que defenderse de ellos con
productos industriales: antisépticos, sueros y vacunas.
Era la primera vez
que los veían con sus rudimentarios microscopios de apenas 20 ó 40 aumentos; no
tenían experiencia previa, puesto que acababan de entrar en la escena
científica y apenas habían avistado a unas pocas especies… sin embargo estas
carencias de conocimiento no les impidió afirmar categóricamente que esos gérmenes
recién vistos eran unos asesinos implacables. Este segundo grupo de médicos,
desde luego, no dio muestras de prudencia científica, más bien, parecían tener
prisa.
Era el tiempo de la
revolución industrial y, curiosamente, a la incipiente industria química y
farmacéutica le pareció muy interesante la
visión sobre los microbios que tenía este segundo grupo de médicos encabezados por el industrial francés
Pasteur, puesto que si había que fabricar productos para defendernos de esos
nuevos invitados significaba que el mercado era enorme. Esta gran simpatía
entre la nueva teoría de la infección y
el mundo industrial fue capital para que se instalara como teoría dominante
y que su dominio se haya mantenido hasta el día de hoy.
Así, en estos
momentos, la inmensa mayoría, por no decir la casi totalidad de las personas,
se trate de gente de a pie con una cultura media o de gente con títulos,
carreras, másteres, especialidades y curriculums de altura, creen a pie
juntillas que esa teoría es correcta. Es más, creen y confían en que en su día,
sus defensores demostraron que era correcta como afirma cualquier enciclopedia,
manual especializado o libro de texto escolar. Sin embargo, el lector debe
saber que no es así en absoluto.
LOS PLAGIOS, FRAUDES
Y MENTIRAS DE PASTEUR
El mencionado industrial francés al que debemos la pasteurización plagió a su maestro Antoine Bechamp y a
otros científicos alterando sus descubrimientos y tergiversándolos, se aprovechó del trabajo de sus
colaboradores atribuyéndose el mérito de sus descubrimientos lo que, dicho sea
de paso, le valió una pensión vitalicia del gobierno, y finalmente -como
demuestran sus notas de laboratorio que quiso mantener ocultas- alteró resultados de sus experimentos
para que encajaran con las ideas que quería defender: la culpabilidad de los
microbios, idea que tampoco era suya, ya que cien años antes, en 1762, el Dr.
M. A. Plenciz ya había publicado un libro titulado precisamente Teoría Microbiana de las Enfermedades
Infecciosas.
Habitualmente se
alude a los famosos Postulados de Koch
para afirmar que son la demostración de que la teoría de la infección es
correcta. Pero los postulados no son propiamente una demostración, sino unos
criterios que deberían servir para demostrar la culpabilidad de los microbios.
De hecho sabemos que Koch cambió el
primero y fundamental de los postulados que decía: "El microorganismo tiene que ser encontrado en abundancia en todos
los organismos que sufren la enfermedad, pero no en organismos sanos".
Las palabras finales fueron suprimidas ante la evidencia de que la inmensa
mayoría de las personas sanas, como ya hemos explicado, tienen a las bacterias
supuestamente responsables en su interior.
Como ejemplo de que
la teoría de la infección no se impuso tras un debate científico que
estableciera su validez sino, como hemos apuntado, por intereses de la
industria, citaremos dos declaraciones de principios del siglo XX
suficientemente elocuentes: en el volumen 180 del 20 de marzo de 1909, la
prestigiosa revista The Lancet,
decía: "todos estos postulados
raramente se cumplen, por no decir nunca... muchos organismos a los que se
considera causantes de enfermedades se encuentran con frecuencia en personas
sanas... por tanto no podemos confiar en
los postulados de Koch como una prueba decisiva de causalidad".
Por su parte, el Dr.
M. L. Leverson, durante una conferencia en Londres el 25 de mayo de 1911, dijo
estas palabras: "Toda la estructura
de la teoría microbiana de la enfermedad descansa sobre asunciones las cuales, no solo no han sido probadas, sino que son
imposibles de probar y muchas de ellas pueden ser contempladas como el
reverso de la verdad".
UNA GUERRA CON “FUEGO
AMIGO”.
Entretanto, el primer
grupo de médicos que hemos mencionado, el de los prudentes que no tenían prisa,
comprobó unos años después y con microscopios de 400 y 600 aumentos que esos
gérmenes que estaban siendo acusados de asesinos, en realidad, eran nuestros
socios y vivían con y dentro de nosotros desde siempre. A partir de los años 70
se introdujeron en biología unos conceptos que no se conocían en la primera mitad del siglo XX; estos
nuevos conceptos fueron el de: ecosistema
o hábitat natural y el de simbiosis de
especies y el lector debe saber que, para muchos médicos y microbiólogos,
los microbios que fueron identificados como causantes de enfermedades como la
difteria, la meningitis, el cólera, la tuberculosis… son gérmenes que poseemos todos los humanos en estado de salud y
que, en realidad, nuestros gérmenes no son nuestros enemigos sino que son
nuestros socios biológicos y conforman lo que se llama el microbioma humano. Nuestro cuerpo es su ecosistema y cumplen una serie de funciones digestivas,
metabólicas, defensivas insustituibles, por lo que son nuestros apreciados simbiontes.
Volveremos enseguida
a estos descubrimientos, pero antes queremos explicar cuáles han sido las
consecuencias que ha tenido para la población de occidente el dominio académico
y mediático de la obsoleta y decimonónica teoría
de la infección sobre la realidad del microbioma
comprobada con mucho más tiempo y mejores medios.
Hemos dicho que el
primer grupo de médicos era mayoritario a finales del siglo XIX y principios
del XX y eso protegió a la población
de ser medicados con las primeras vacunas y productos antisépticos que eran tan
tóxicos y peligrosos que todos, sin excepción fueron abandonados unos años
después. Pero, después de la segunda guerra mundial, el predominio indiscutible
de la teoría de la infección era total y, desde entonces (años 50 y 60) se
procedió a la vacunación masiva de toda la población y al consumo también
masivo de antibióticos.
Las vacunas prometían
tener la capacidad de mejorar nuestro sistema
inmunitario y hacerlo más eficiente frente al ataque de los gérmenes; y los
antibióticos habían demostrado que
mataban a los gérmenes porque les impedían la síntesis de proteínas necesarias
en su metabolismo de membrana. En los años 90 se supo que tenían esa acción
letal sobre los gérmenes porque afectaba el ADN de éstos y distorsionaban su
mensaje genético.
Hay que decir que los
antibióticos serían una medicación antibacteriana ideal, para los que creen que nuestros gérmenes son agresivos, si
en realidad ejercieran su acción tóxica sólo y exclusivamente sobre el grupo de
bacterias que se cree que son la causa de la enfermedad y sobre la zona o el
órgano del cuerpo que se cree infectado; por ejemplo si ante un diente
infectado o una herida en un determinado sitio… el antibiótico sólo actuara
sobre esas bacterias y esa zona aislada del organismo… pero eso no es así ni
remotamente. Resulta que la acción tóxica del antibiótico no es selectiva en absoluto y ataca igualmente el ADN nuclear y al
ARN mitocondrial de las bacteria y de todas las células de nuestro organismo,
provocando los mismos estragos. No es posible, hasta la fecha, separar el
ataque sobre las bacterias del ataque sobre nuestras células.
LOS EFECTOS COLATERALES
DEL BOMBARDEO
INDISCRIMINADO.
Como la visión paranoica de
la infección ha sido dominante y
excluyente desde los años 60 del siglo pasado, como consecuencia, toda la
población ha sido sometida a múltiples vacunaciones con la intención o,
podríamos decir, la promesa prematura de que con esa práctica se iba a mejorar
el sistema inmunitario de las nuevas
generaciones que, por ello, se iban a convertir en los primeros humanos cobaya que se iban a someter a una
nueva experiencia que no conocían sus antepasados.
Pasaron unos pocos
años y a finales de los años 70 empezaron a aparecer unas enfermedades nuevas y desconocidas: Enfermedad de
Kronn, esclerosis múltiple, colitis ulcerosa, intolerancias alimentarias,
dermatitis, alergias variadas… que se
hicieron cada vez más frecuentes y afectaban exclusivamente a la joven
generación de cobayas que se habían sometido al experimento de mejorar su
sistema inmunitario mediante las vacunas.
Pero lo que más
sorprendió a los patólogos de los años 70 fue descubrir que esas nuevas enfermedades estaban siendo
producidas por el propio sistema
inmunitario de esos individuos a los que se había vacunado múltiples veces
con la intención de mejorar ese mismo sistema
inmunitario. Lo tuvieron tan claro que las llamaron enfermedades autoinmunes porque vieron claramente
que el sistema inmunitario de estos enfermos, de repente, se había vuelto traidor
y en vez de defender al organismo como había hecho siempre, por alguna razón,
identificaba a los propios órganos y sistemas como alienígenas y los atacaba
con todo su potencial.
Esas enfermedades
empezaron a aparecer en la década de los 70 y han ido aumentando en frecuencia
de una manera exponencial, hasta tal punto que las enfermedades autoinmunes afectan casi a la mitad de
la población en la primera década del tercer milenio.
El sistema sanitario y docente oficial niega, rotundamente, cualquier relación
entre el hecho de haber manipulado masivamente el sistema inmunitario por primera vez en la historia… y la aparición,
por primera vez en la historia, de una enorme cantidad y variedad de
enfermedades autoinmunes… pero… ¿qué
opina el lector?
Las nuevas
generaciones de ciudadanos cobaya no solo padecen de enfermedades autoinmunes,
sino que se ha detectado también una situación totalmente novedosa a la vez que
demoledora que nosotros achacamos a la acción de los antibióticos. Sabemos que estas sustancias matan bacterias y
paralizan su reproducción porque afectan a su ADN y sabemos que no hay forma de
impedir que afecten también al ADN de nuestras propias células; como
consecuencia de este ataque continuado al ADN de las nuevas generaciones se han
producido dos fenómenos graves: la
infertilidad de los jóvenes cobayas; según los informes del Banco Mundial,
la fertilidad ha disminuido en el mundo un 50% en los últimos cincuenta años; y
la aparición masiva de las denominadas enfermedades
raras que son un grupo de nuevas enfermedades que se caracterizan por su
atrocidad, puesto que como son consecuencia de alteraciones del ADN y ARN, los
niños descendientes de padres cuyos genes están distorsionados nacen con
malformaciones en órganos y sistemas. En la actualidad hay controlados 27
millones de casos en Europa, otro tanto en Estados Unidos y 42 millones en
Iberoamérica, es decir unos cien
millones de personas entre Europa y América; nunca hubo una epidemia de tal
magnitud ni ferocidad.
LOS ÚLTIMOS DESCUBRIMIENTOS
DE LA BIOLOGÍA
DAN LA RAZÓN A LOS MÉDICOS
TRADICIONALES
Hemos dicho que las primeras
vacunas despertaron la desconfianza de los médicos tradicionales y naturales
que entendían que los problemas de salud respondían a condiciones de vida individuales
y no a supuestas invasiones que provocaran enfermedades en serie para ser
combatidas con productos también fabricados en serie. Pues bien, como ya hemos
apuntado, las más recientes investigaciones en biología están dando la razón a
esos médicos que trataban enfermos y no enfermedades y poniendo en evidencia la
guerra autodestructiva contra los microbios.
De hecho, uno de los descubrimientos claves se produjo a
mediados del siglo XX y poco a poco va ganándose el respeto de más y más
profesionales y académicos: nuestras células son el resultado de la fusión de
diferentes microorganismos que continúan viviendo en simbiosis, de modo que nuestro ADN integra la información genética
de bacterias y virus, y en nuestras células continúan viviendo antiguas bacterias
que posibilitaron la obtención de energía a partir del oxígeno: las mitocondrias celulares, que tienen su
propio ADN y que son tan sensibles a los antibióticos como cualquier otra
bacteria de nuestro microbioma.
La primera descripción del microbioma -que incluye
bacterias, arqueas, levaduras, eucariotas unicelulares, helmintos, hongos y
virus- ya le valió un Premio Nobel al microbiólogo Joshua Lederberg en 1958.
Ahora, sesenta años después, sabemos que la madre trasmite poblaciones de
microbios al feto durante su estancia en el útero -se han encontrado bacterias
en la placenta, en el cordón umbilical, en el líquido amniótico, en membranas
fetales y en el meconio- sumándose posteriormente otras durante el parto
vaginal y, una vez nacido el bebé, mediante el contacto piel con piel y a
través del calostro y la leche materna que contienen 700 especies bacterianas,
cuya función es aún desconocida pero que muy probablemente tendrán relación con
los mecanismos de equilibrio y convivencia que caracterizan la simbiosis.
¿TENEMOS UN EJÉRCITO DEFENSIVO O
UN SISTEMA REGULADOR DE LA SIMBIOSIS?
La teoría de la infección
planteaba una visión belicista de salud, como si las enfermedades fueran
invasiones que llegan del exterior y nada tienen que ver con nuestros hábitos
de vida o nuestra alimentación o el estado de pureza del aire que respiramos,
sino con ejércitos invasores. Esa visión trasnochada y un poco paranóica se
complementaba con otro elemento imprescindible en cualquier enfrentamiento
bélico: un ejército defensivo encargado de luchar contra los microbios y que
podría entrenarse para ello mediante la administración de vacunas, que serían
una imitación debilitada del enemigo para conocerlo y aprender a neutralizarlo.
La pregunta que nos hacemos ahora es si es real ese
ejército, si realmente hay que interpretar el llamado "sistema
inmunitario" de ese modo y si es cierto que su función principal sea
luchar contra los microbios. Así es como se interpreta desde una lógica
belicista, pero si se aplica la lógica de la cooperación en lugar de la lógica
del enfrentamiento, entonces no puede por menos que sonar contradictorio que la naturaleza nos haya dotado de una multitud de
pequeños colaboradores que cumplen funciones a veces tan cruciales como regular
el crecimiento del feto, y al mismo tiempo pusiera ahí, a su lado, un ejército
para exterminarlos.
Hagamos un esfuerzo para mirar sin prejuicios. Según los
cálculos más recientes, nuestro organismo tiene por término medio unos 37
billones de células, un uno por ciento de las cuales muere cada día y debe ser
repuesto. Partes de estas células son aprovechables, es decir, reciclables,
pero el resto, al igual que los productos de desecho del metabolismo es
literalmente basura que hay que eliminar: el reciclaje y la eliminación de la
basura son tareas fundamentales para la salud medioambiental en un pueblo y en
un organismo, que es un ecosistema a pequeña escala.
¿Quién hace esa tarea? ¿Quiénes son los basureros del
cuerpo? Una vez más, las recientes investigaciones van dando la razón a las
medicinas tradicionales y naturales. Tanto la tarea fundamental de limpieza
como otras relacionadas con la producción de energía o la regulación de la
convivencia las lleva a cabo un sistema desarrollado como fruto de la
interacción con el entorno durante miles de millones de años que se denominó
"sistema inmunitario" desde el paradigma belicista pero que con los
conocimientos actuales podríamos denominar a partir de sus funciones
"sistema de reciclaje y limpieza", o mejor aún "sistema de
regulación de la simbiosis" ya que la finalidad última de todas las tareas
que cumple es la buena convivencia.
En los límites de un artículo no podemos explicar en
detalle la compleja estructura de este sistema y las funciones que realiza en
colaboración con numerosos órganos y tejidos. La idea clave que queremos
trasladar es que no se trata de un ejército que luche contra los microbios que
nos invaden, sino que cumple diversas tareas para mantener el equilibrio interno y la simbiosis con nuestros microbios.
Aún no conocemos con precisión cuando comienza y cuánto
dura el desarrollo de ese sistema y de sus conexiones con el resto del
organismo así como de las interacciones con bacterias y otros microorganismos
del microbioma. La neurología, la psicología, la neonatología, la
endocrinología, la bioquímica y otras disciplinas van añadiendo poco a poco
elementos a un proceso estimado en torno a los dos años, lo que supone que una
gran parte de las vacunas se administran en el momento en que se está desarrollando
ese delicado y complejo proceso de maduración, lo que con toda probabilidad
debe jugar un papel en las llamadas "reacciones adversas" pero
también en todos los nuevos problemas de salud y enfermedades que ya hemos
mencionado.
En definitiva, nuestras investigaciones nos llevan a
concluir que las vacunas no tienen
sentido biológico, es decir, no se corresponden con la lógica de los
procesos vitales, y no tienen base teórica demostrada. Como consecuencia de
todo ello, dudamos profundamente que hayan podido erradicar enfermedades o
proteger contra ellas; más bien creemos que sucede lo contrario: son peligrosas para la salud y la vida,
y responsables con toda probabilidad de una multitud de nuevas enfermedades
graves, crónicas y degenerativas.
Los argumentos que hemos expuesto en este artículo nos
parece que refuerzan la legitimidad de la lucha que en estos momentos está
llevando a cabo la ciudadanía en Italia y que muy probablemente se extenderá a
otros países ya que, a la vista de los daños que han causado ya las vacunas y
del enorme peligro que suponen de cara al futuro, es más importante que nunca
buscar información crítica, difundirla al máximo y oponerse firmemente a las
leyes y decretos que pretenden impedir nuestro derecho a decidir.
El Dr. Enric Costa (Gandía, 1955) es licenciado en medicina y cirugía y ejerce desde hace 38 años como médico de familia desde un perspectiva holística. En 2016 escribimos y publicamos conjuntamente el libro Vacunas: una reflexión crítica, publicado por iEdiciones en castellano y por Llibres de l'Index en catalán.
Más información: Presentaciones y reseñas del libro Vacunas: una reflexión crítica
Artículo publicado inicialmente en el número 62 de la revista Scienza e Conoscenza, en septiembre de 2017, con el título "I vaccini: sono davvero necessari?".
miércoles, 11 de octubre de 2017
Fármacos peligrosos, vacunas obligatorias y ciencia postmaterialista
Comparto mis colaboraciones de los últimos meses con la
revista Discovery DSalud.
Un nuevo estudio lo confirma: las farmacias están cada vezmás llenas de medicinas peligrosas
Un reciente estudio llevado a cabo por diez investigadores estadounidenses y
franceses que acaba de publicarse en el Journal of American Medical Association
-órgano de la Asociación Médica Americana (AMA por sus siglas en inglés)-
desvela que 71 de los 222 fármacos aprobados por la FDA entre 2001 y 2010
fueron posteriormente calificados como peligrosos. Y es que una vez
comercializados se descubrió que pueden provocar graves problemas de salud que
incluyen daños hepáticos, cáncer e incluso la muerte.
El trabajo demuestra -una
vez más- que nuestras numerosas denuncias sobre el peligro de los fármacos
-especialmente de los más "modernos"- están fundamentadas. Y sobre
todo que las agencias reguladoras y los gobiernos no hacen bien su trabajo y
aprueban medicamentos no ya ineficaces -la mayoría- sino encima peligrosos.
Italia: ¡pretenden obligar a los menores de diecisiete añosa inocularse 10 vacunas!
El gobierno italiano pretende obligar por ley a todos los
menores de diecisiete años a inocularse ¡10 vacunas! Y para forzar a los padres
les dicen que los que no se vacunen no podrán acceder a las guarderías,
escuelas infantiles, colegios e institutos; es más, propone imponerles fuertes
multas e incluso amenaza con retirarles la custodia.
La decisión ha provocado
un movimiento social sin precedentes con manifestaciones por todo el país:
Ancona, Bari, Bolonia, Brindisi, Catania, Florencia, Génova, Milán, Nápoles,
Padura, Parma, Rimini, Turín, Trento, Roma... Y más de 130 familias han pedido
ya ¡asilo! en Austria. Pues bien, líderes políticos, abogados, médicos y otros
expertos están dispuestos a impedirlo por considerarlo inconstitucional además
de un sin sentido porque ni la eficacia ni la seguridad de las vacunas se ha
demostrado jamás.
Una petición que el Foro Europeo para la Vigilancia de las
Vacunas ha dirigido al Parlamento Europeo, a la Comisión Europea y al Consejo
de la Unión Europea a través de la plataforma Change.org y que con el título
Respetar, promover y proteger la libertad de vacunación informada en todaEuropa reivindica lo siguiente:
1. Abolir las vacunaciones obligatorias en toda Europa ya
que constituyen una violación de los derechos humanos universales.
2. Que la vacunación obligatoria no se introduzca nunca en
ningún país en los que actualmente están recomendadas.
3. Que se aplique el Principio de Precaución en caso de
vacunación en Europa.
4. Que los ciudadanos europeos se beneficien de libertad
absoluta de elección y del consentimiento informado.
5. Que se establezca un sistema europeo de comunicación de
efectos adversos de vacunas efectivo e independiente.
Manifiesto por una Ciencia Post-materialista
Dos centenares de destacados expertos e
investigadores de muy distintas disciplinas académicas entiende que ha llegado
el momento de abandonar el actual paradigma científico materialista y
reduccionista repleto de dogmas obsoletos porque obstaculizan el desarrollo
científico, social y cultural. Y así lo piden en su Manifiesto para una cienciapost-materialista entre cuyos firmantes se hallan personalidades tan conocidas
como Rupert Sheldrake, Larry Dossey, Mario Beaugerard, Lisa Jane Miller, Gary
E. Schwartz, Alexander Moreira-Almeida, Marilyn Schlitz o Charles Tart entre
otros muchos científicos de grandes universidades. Se postula pues dar un salto
cuántico y asumir el nuevo paradigma al que nos han llevado los descubrimientos
y avances de las últimas décadas e impedir que el viejo y caduco paradigma
imposibilite a la sociedad avanzar rápidamente.
Lo paradójico es que las teorías materialistas no logran
explicar, por ejemplo, cómo el cerebro genera la mente, o las evidencias
empíricas relatadas. Un fracaso que parece estar urgiéndonos a abandonar
"los grilletes y anteojeras de la vieja ideología materialista para
agrandar nuestro concepto del mundo natural y adherirnos a un nuevo paradigma
postmaterialista" que tendría las siguientes características:
- el plano mental es tan importante o más que el físico;
- existen interconexiones profundas entre estos dos planos;
- por tanto, la mente puede influir sobre el estado del
mundo físico a través de intenciones, emociones o deseos;
- es muy posible que exista una única mente ilimitada que
incluye las mentes individuales;
- el cerebro no crea la mente sino que es una especie de
receptor que ésta utiliza y del que no depende para existir en un nivel de
realidad inmaterial no corporal;
- los científicos deberían aceptar que la espiritualidad
representa un aspecto central de la experiencia humana y por tanto no puede
excluirse en una investigación.
En definitiva, el reto parece ser muy claro: ¿vamos a seguir
aferrándonos a ideas caducas generadas por una ciencia reduccionista que se
niega a ver más allá de lo que considera de forma dogmática e incluso teñida de
fanatismo, lo único existente o vamos a continuar abriendo más y más nuestra
visión, recuperando saberes olvidados o prohibidos, conocimientos tradicionales
despreciados, técnicas de curación denostadas por intereses económicos,
enfoques y visiones del mundo, de la vida y del universo que aportan
explicaciones globales, un mayor conocimiento y la posibilidad de crecer como
humanos respetando y armonizándonos con el entorno? ¿Vamos a continuar
encerrados en esas pequeñas falsas verdades que interesan a unos pocos o vamos
a abrirnos a posibilidades ilimitadas de conocimiento, salud y convivencia con
el resto de la biosfera? ¿Vamos a limitarnos a lo puramente material o vamos a
dar un paso hacia esa realidad postmaterialista que nos conecta con la esencia
de lo humano: las emociones, las esperanzas, la imaginación, la esencia de lo
vivo?
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domingo, 8 de octubre de 2017
Wilhelm Reich, inspirador de rebeldía
He puesto el punto final en el borrador definitivo de mi último libro.
Cuarenta años después de leer por primera vez a Wilhelm Reich...
Siete años después de proponer la publicación de un libro que sirviera para ilusionar a la gente y animarla a que lo conocieran...
Tres meses de encierro voluntario doce horas al día volviendo a recorrer la vida y la obra del genio descubridor de la energía de la vida...
Ahí están las ciento cincuenta páginas que condensan su impactante aventura vital, su legado caleidoscopio, su desafío a los poderes establecidos, su inspiración para la rebeldía.
El manuscrito -que incorpora breves colaboraciones de personas muy implicadas en el legado reichiano- está ya en manos de Cauac Editorial Nativa y el proceso de edición se ha puesto en marcha.
Muy pronto comenzaremos a presentarlo.
Gracias por la ayuda prestada a quienes la prestaron y, en particular, a quienes han soportado mi presencia o mi ausencia durante ese encierro estival.
Cuarenta años después de leer por primera vez a Wilhelm Reich...
Siete años después de proponer la publicación de un libro que sirviera para ilusionar a la gente y animarla a que lo conocieran...
Tres meses de encierro voluntario doce horas al día volviendo a recorrer la vida y la obra del genio descubridor de la energía de la vida...
Ahí están las ciento cincuenta páginas que condensan su impactante aventura vital, su legado caleidoscopio, su desafío a los poderes establecidos, su inspiración para la rebeldía.
El manuscrito -que incorpora breves colaboraciones de personas muy implicadas en el legado reichiano- está ya en manos de Cauac Editorial Nativa y el proceso de edición se ha puesto en marcha.
Muy pronto comenzaremos a presentarlo.
Gracias por la ayuda prestada a quienes la prestaron y, en particular, a quienes han soportado mi presencia o mi ausencia durante ese encierro estival.
sábado, 10 de junio de 2017
Respuesta a la carta de Lucía Galán Bertrand
Tras unos breves comentarios que el presentador de RTVE Javier Cárdenas hizo aludiendo a la posible relación entre las vacunas y el autismo, se ha desatado contra él la furia de derecha, izquierda, arriba y abajo. Medios tan dispares como Público o Libertad Digital coinciden en una brutal andanada contra Cárdenas con un ejército de blogueros y youtubers descalificando y repitiendo las consignas del poder sobre las vacunas.
Estoy comentando en algunos medios y respondiendo a los pocos comentarios que utilizan argumentos por breves y manipulados que estén. Y por supuesto, he respondido en su blog a la pediatra Lucía Galán Bertrand. Copio aquí para difundir con más agilidad la respuesta a su carta.
Respondo a los tres argumentos que se dan en la carta:
1. “Las vacunas no causan autismo”.
Personalmente no considero que el conjunto de problemas de salud que se denomina “autismo” o “trastornos del espectro autista” tenga una única causa, cosa que por otra parte sucede con otros muchos problemas de salud.
Eso no significa que podamos denigrar el trabajo del Dr. Andrew Wakefield quien encontró una relación entre la triple vírica y desórdenes mitocondriales, una inflamación peculiar del intestino y el autismo. El trabajo publicado desató una persecución contra él que he investigado personalmente (https://www.dsalud.com/reportaje/las-vacunas-pueden-causar-autismo/) y que lo obligó a continuar su trabajo en Estados Unidos. Es interesante señalar que su colaborador el profesor Walker Smith fue también denostado y posteriormente ha ganado en los tribunales el juicio contra sus difamadores.
No soy especialista y no voy a proponer yo el término adecuado. Pero las dimensiones del problema son estas: en la década de los 80 del siglo XX el autismo afectaba a 1 de cada 10.000 niños estadounidenses; actualmente se habla de 1 entre 80 y 90, y en constante aumento. Por otra parte, merece la pena señalar que en Islandia donde se administran 11 vacunas recomendadas la tasa actual de casos de autismo es de 1/1.100 o en Noruega, también con 11 vacunas, es de 1/2.000, mientras en Estados Unidos las vacunas administradas ascienden a 36.
3. “Las vacunas son seguras, no contienen mercurio, son efectivas y salvan cada año millones de vidas en el mundo”.
Todo indica que los peligros de las vacunas y su falta de eficacia se esconde al público. Poco a poco vamos conociendo la verdad. Por ejemplo, en 2011, documentos secretos obtenidos por la doctora Lucija Tomljenovic merced a la Ley de Libertad de Información revelan que los miembros del Comité sobre Vacunación e Inmunización que asesora al Gobierno británico sobre las vacunas así como varios ministros de Sanidad de los últimos treinta años conocían los graves peligros y la falta de eficacia de las mismas a pesar de lo cual las aprobaron e incluyeron en el llamado calendario vacunal británico ocultando información importante y trascendente al público (https://www.dsalud.com/reportaje/el-engano-intencionado-de-las-vacunas/). Es solo un ejemplo.
El hecho de que todos y cada uno de los miembros del Comité Asesor sobre vacunas de la Asociación Española de Pediatría tengan lazos financieros con los fabricantes de vacunas, no parece que garantice mucho la independencia y el rigor de su trabajo de asesoría.
Creo que ya está bien de repetir una y otra vez las mismas consignas y hacerlo aprovechando la credibilidad que el público en general le da a una persona que se presenta como pediatra.
Como usted sabe esta petición y otras muchas preguntas y críticas -planteadas desde la honestidad y el rigor y con la voluntad de ayudar a la gente a conocer la verdad- se las he hecho ya en numerosas ocasiones en su blog sin obtener hasta el momento otra respuesta que el silencio. Efectivamente, hablamos de vidas y de muertes…
Respondo a los tres argumentos que se dan en la carta:
1. “Las vacunas no causan autismo”.
Personalmente no considero que el conjunto de problemas de salud que se denomina “autismo” o “trastornos del espectro autista” tenga una única causa, cosa que por otra parte sucede con otros muchos problemas de salud.
Eso no significa que podamos denigrar el trabajo del Dr. Andrew Wakefield quien encontró una relación entre la triple vírica y desórdenes mitocondriales, una inflamación peculiar del intestino y el autismo. El trabajo publicado desató una persecución contra él que he investigado personalmente (https://www.dsalud.com/reportaje/las-vacunas-pueden-causar-autismo/) y que lo obligó a continuar su trabajo en Estados Unidos. Es interesante señalar que su colaborador el profesor Walker Smith fue también denostado y posteriormente ha ganado en los tribunales el juicio contra sus difamadores.
Por otra parte, numerosos equipos han llegado a conclusiones similares a las de Wakefield. Aquí pueden descargarse 132 artículos que relacionan las vacunas con el autismo: https://es.scribd.com/doc/220807175/132-Research-Papers-Supporting-the-Vaccine-Autism-Link
2. “No hay ninguna epidemia de autismo”.
2. “No hay ninguna epidemia de autismo”.
No soy especialista y no voy a proponer yo el término adecuado. Pero las dimensiones del problema son estas: en la década de los 80 del siglo XX el autismo afectaba a 1 de cada 10.000 niños estadounidenses; actualmente se habla de 1 entre 80 y 90, y en constante aumento. Por otra parte, merece la pena señalar que en Islandia donde se administran 11 vacunas recomendadas la tasa actual de casos de autismo es de 1/1.100 o en Noruega, también con 11 vacunas, es de 1/2.000, mientras en Estados Unidos las vacunas administradas ascienden a 36.
3. “Las vacunas son seguras, no contienen mercurio, son efectivas y salvan cada año millones de vidas en el mundo”.
Todo indica que los peligros de las vacunas y su falta de eficacia se esconde al público. Poco a poco vamos conociendo la verdad. Por ejemplo, en 2011, documentos secretos obtenidos por la doctora Lucija Tomljenovic merced a la Ley de Libertad de Información revelan que los miembros del Comité sobre Vacunación e Inmunización que asesora al Gobierno británico sobre las vacunas así como varios ministros de Sanidad de los últimos treinta años conocían los graves peligros y la falta de eficacia de las mismas a pesar de lo cual las aprobaron e incluyeron en el llamado calendario vacunal británico ocultando información importante y trascendente al público (https://www.dsalud.com/reportaje/el-engano-intencionado-de-las-vacunas/). Es solo un ejemplo.
El hecho de que todos y cada uno de los miembros del Comité Asesor sobre vacunas de la Asociación Española de Pediatría tengan lazos financieros con los fabricantes de vacunas, no parece que garantice mucho la independencia y el rigor de su trabajo de asesoría.
Creo que ya está bien de repetir una y otra vez las mismas consignas y hacerlo aprovechando la credibilidad que el público en general le da a una persona que se presenta como pediatra.
Como usted sabe esta petición y otras muchas preguntas y críticas -planteadas desde la honestidad y el rigor y con la voluntad de ayudar a la gente a conocer la verdad- se las he hecho ya en numerosas ocasiones en su blog sin obtener hasta el momento otra respuesta que el silencio. Efectivamente, hablamos de vidas y de muertes…
Es por eso un imperativo ético exigirle que aporte las pruebas pertinentes de sus afirmaciones o que rectifique y deje de dar lecciones y criminalizar en su blog a quienes, de modo responsable y documentado, deciden no vacunar y compartir sus conocimientos para que la gente pueda tomar decisiones libres y fundamentadas.
Más información sobre la persecución contra Wakefield y el encubrimiento de los CDC:
-- Aquí puede leerse el relato detallado de los hallazgos del Dr. Wakefield y la persecución que se desató contra él en Reino Unido:
https://www.dsalud.com/reportaje/las-vacunas-pueden-causar-autismo/
-- Aquí la crónica documentada del encubrimiento intencionado de la relación vacunas-autismo que los CDC llevaron a cabo falseando estudios y manipulando información:
https://www.dsalud.com/reportaje/timerosal-y-autismo-silencio-ocultacion-y-mentiras/
-- Aquí la confirmación del fraude: un científico de los CDC se arrepiente y confiesa la ocultación al tiempo que pide perdón a Wakefield y a las familias afectadas:
https://www.dsalud.com/reportaje/confirmada-la-farsa-de-los-cdc-las-vacunas-causan-autismo/
--Actualización sobre este caso:
http://medicalkidnap.com/2016/05/02/dr-brian-hooker-exposes-fraud-at-the-cdc-congress-refuses-to-hold-hearings/
https://www.focusforhealth.org/dr-brian-hooker-statement-william-thompson/
https://www.focusforhealth.org/is-science-dead/
Ediciones i / Llibres de l’Index, 2016.
Dr. Enric Costa Vercher / Jesús García Blanca
miércoles, 31 de mayo de 2017
Josep Pàmies: un ejemplo de resistencia y honestidad
Reproduzco la crónica que los amigos de Ser y Actuar han difundido en relación con el juicio a Josep Pàmies y animo a difundir esta y otras informaciones que podéis encontrar tanto en el blog de Ser y Actuar como en la web del propio Pàmies y en su cuenta de YouTube.
Ninguna planta es ilegal
El jueves 25 de mayo por la mañana tuvo lugar en el Palau de Justicia de Lleida el juicio contra Josep Pàmies por cultivo ilegal de marihuana.


También se le preguntó si tenía algún control sobre los propietarios de las plantas, y sobre su uso posteriormente a la recogida. A lo que respondió que no, que sólo les había cedido el terreno y que eran personas de confianza de la asociación que efectuaban el cultivo de las plantas para un uso propio y terapéutico.

La fiscal llamó a declarar a los tres Mossos d’Esquadra que intervinieron en la denuncia e incautación de las plantas, pero básicamente sólo les preguntó si se ratificaban en el informe y si habían observado que las plantas estuvieran etiquetadas con nombres de personas. Los policías se ratificaron en el informe y declararon que no prestaron atención a las plantas puesto que estaban buscando a la nieta desaparecida de Josep Pàmies.
La argumentación de la fiscal fue inconsistente y no dio muestras de haberse estudiado demasiado el caso. Una prueba de ello fue cuando confundió las tinturas elaboradas a partir de las plantas con tintes. La segunda vez que el público se rió, la juez, a petición de la fiscal, advirtió que desalojaría la sala si se volvía a oír una sola risa, con lo que el público guardó un silencio sepulcral hasta el final de la sesión.
En cambio la argumentación de la defensa, llevada a cabo por Anaís Franquesa, fue sólida y bien elaborada, aportando abundante documentación sobre jurisprudencia, de la que la juez tomó nota minuciosamente.
La abogada consiguió que finalmente fueran admitidos algunos de sus testigos. Inicialmente no le habían admitido ninguno pero, después de una queja bien argumentada, la juez admitió a cinco de ellos.

También dieron testimonio propietarios de plantas, declarando el número de plantas que poseían y que no habían podido recogerlas, testimoniando las afecciones que esta planta les había ayudado a superar.

La abogada de la defensa en primer lugar puso de manifiesto que había sido el propio acusado quien había llamado a la policía para que les ayudasen a encontrar a una nieta suya que había desaparecido. Que en todo momento había actuado abiertamente y sin nada que esconder. Finalmente encontraron a la niña que estaba jugando al escondite, juego que por cierto demostró dominar a la perfección.
La abogada también argumentó que Josep Pàmies únicamente les había cedido el terreno para su uso y que no formaba parte de ese grupo de 46 socios. Aportó abundante documentación sobre jurisprudencia de la que la juez tomó nota minuciosamente. Explicó que la planta de la marihuana tiene un ciclo de vida que empieza en primavera y termina en otoño. Por tanto, no es de extrañar que, quien cultiva marihuana para uso propio, tenga que plantar la suficiente para tener para todo el año. Que el Tribunal Supremo establece como consumo habitual de una persona 100 gramos cada cinco días. Por lo tanto, el Sr. Pàmies hubiera podido tener las 89 plantas para su propio autoconsumo. Podría haber dicho que las plantas eran suyas. Porque el peso neto de las mismas es de unos 1.800 gramos. Con esto, una sola persona tiene para tres meses. Por tanto la jurisprudencia establece que la cantidad en si misma, sin tener en cuanta el cultivo compartido y todas las pruebas presentadas, con sólo el hecho de que se trata de 1.878,79 gramos, ya queda establecido que es una cantidad irrisoria y que sería para el consumo de una sola persona durante tres meses.

Si bien desde un punto de vista penal es irrelevante si la marihuana es para uso terapéutico o para uso recreativo, desde el punto de vista de la Asociación, ésta nunca ha querido promover un uso indiscriminado de la marihuana, ni ocioso. Existen numerosos estudios científicos sobre las propiedades terapéuticas de la marihuana. Tanto es así que está legalizada en 25 estados de los EEUU, así como en Alemania, Argentina, México, Italia, República Checa, Uruguay, Australia, Nueva Zelanda… etc. Y la Dulce Revolución y el Sr. Pàmies defienden precisamente el uso terapéutico de las plantas medicinales.
Por todo ello la defensa consideró que en ningún momento se cometió delito alguno contra la salud pública.

Cuando la Juez preguntó si el acusado tenía algo más que añadir, Josep Pàmies dijo que con estos 1.800 gramos para las personas que la fumaran no sería demasiado, pero para las personas que necesitasen un uso medicinal, con muy pocos gramos tendrían para bastante tiempo. Y que para este uso terapéutico los beneficios que pueden obtenerse son extraordinarios, más de lo que mucha gente se imagina. Añadió que cree que algún día, en vez de encontrarse él en esta sala, estarán muchos gerentes y propietarios de esta industria farmacéutica que conlleva 200.000 muertes al año sólo en Europa con sus drogas legales, que causan la muerte. Y que espera que algún día sea así y se haga justicia con esas drogas legales. Las hierbas medicinales han de ser una prioridad total…
Llegados a este punto la Juez interrumpió al Sr Pàmies, dio por terminada la sesión y desalojó la sala.
Llegados a este punto la Juez interrumpió al Sr Pàmies, dio por terminada la sesión y desalojó la sala.

En la acera de enfrente había instalada una larga mesa con un catering de Slow Food con abundante comida y bebida ecológica, exquisitamente preparada por miembros y acompañantes de la Asociación de la Dulce Revolución de las Plantas Medicinales. Cajas con albaricoques ecológicos, dulces como la miel, recién recogidos del árbol el día anterior y un ambiente festivo con el que Josep Pàmies quiso convertir el día del juicio en la fiesta de la marihuana.


Fuente: Ser y Actuar: https://seryactuar.org/2017/05/29/juicio-a-josep-pamies/
miércoles, 10 de mayo de 2017
Sigo en la brecha
De vuelta en el blog tras una temporada perdido en la escritura de ficción, pongo a los visitantes internautas al tanto de mis últimos quehaceres relacionados con los mecanismos de poder en el terreno de la salud.
Lo más concreto y fácil de recopilar es mi trabajo en Discovery DSalud, revista en la que he continuado publicando los resultados de mis investigaciones y entrevistas. Desde mi último comentario, en julio de 2016, han aparecido los siguientes trabajos míos:
196. Cien premios Nobel al servicio de la industria biotecnológica / septiembre 2016.
198. Entrevista a Alicia Capilla (Asociación Afectadas por
la vacuna del papiloma) / noviembre 2016.
Lo más concreto y fácil de recopilar es mi trabajo en Discovery DSalud, revista en la que he continuado publicando los resultados de mis investigaciones y entrevistas. Desde mi último comentario, en julio de 2016, han aparecido los siguientes trabajos míos:
196. Cien premios Nobel al servicio de la industria biotecnológica / septiembre 2016.
196. ¿Se usan los móviles como método de control social? /
septiembre 2016.
198. Entrevista al Dr. Olea / noviembre 2016.

199. La Academia de Ciencias estadounidense oculta los
peligros de los transgénicos / diciembre 2016.
199. Entrevista a Kistiñe García (Ecologistas en Acción) / diciembre
2016.
201. La simplicidad voluntaria: un camino a la salud / febrero
2017.
202. No se ha demostrado la existencia del virus del
sarampión / marzo 2017.
202. Estados Unidos: 3300 millones de dólares por daños y
muertes causadas por vacunas / marzo 2017.
204. La industria farmacéutica y alimentaria soborna a los
políticos / mayo 2017.
204. ¿Puede detectarse con nanotecnología un virus que no se
ha aislado? / mayo 2017.
205. Monsanto condenado por un tribunal civil internacional
/ mayo 20
En estos meses he publicado también algunos textos en Mente Sana: tras los dossieres sobre Escoger escuela ( 114), Alice Miller (115), Wilhelm Reich (116), Bioenergética (117) y Françoise Dolto (118) y Antipsiquiatría (119), he publicado
126. Una breve aportación al dossier Más ayudas en tu camino con un apunte sobre terapia reichiana titulado: Libérate de tus corazas.
130. Un dossier sobre María Montessori.
133. Un dossier sobre Virginia Satir: El apoyo de los demás te cura.
Y en Cuerpomente:
287. Un especial salud sobre La nueva medicina de la mente, incluyendo entrevista a Javier Álvarez.
290. Un especial salud sobre El camino del instinto, incluyendo una estupenda entrevista con uno de mis maestros: Eneko Landaburu.
293. Un especial salud sobre Homeopatía: Los secretos de una medicina completa.
Por último, comparto un artículo que me pidieron los amigos de El Topo (Sevilla) en el que hago un resumen sintético pero jugoso de los dos conceptos de salud: el que llevo años analizando y criticando, impuesto por la medicina moderna hegemónica, y el otro, el que quisiera ayudar a construir desde una visión dinámica de la vida y del ecosistema:
Recuperando el poder sobre nuestra salud
https://issuu.com/topotabernario/docs/el_topo_17/5
Por último, comparto un artículo que me pidieron los amigos de El Topo (Sevilla) en el que hago un resumen sintético pero jugoso de los dos conceptos de salud: el que llevo años analizando y criticando, impuesto por la medicina moderna hegemónica, y el otro, el que quisiera ayudar a construir desde una visión dinámica de la vida y del ecosistema:
Recuperando el poder sobre nuestra salud
https://issuu.com/topotabernario/docs/el_topo_17/5
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lunes, 16 de enero de 2017
Mi última intervención en Facebook
AVISO A NAVEGANTES
Con el cierre del año, cerraré mi cuenta de facebook.
La escritura reclama para sí el tiempo y el esfuerzo que ahora empleo aquí.
Mantendré -por ahora- mi blog sobre salud, mi blog sobre literatura y mi correo electrónico, aunque dudo que sea por mucho tiempo.
Gracias por vuestra atención a quienes me hacéis llegar piropos y felicitaciones y también a los críticos e incluso a los insultones: seguro que todo ha resultado enriquecedor en este foro.
La escritura reclama para sí el tiempo y el esfuerzo que ahora empleo aquí.
Mantendré -por ahora- mi blog sobre salud, mi blog sobre literatura y mi correo electrónico, aunque dudo que sea por mucho tiempo.
Gracias por vuestra atención a quienes me hacéis llegar piropos y felicitaciones y también a los críticos e incluso a los insultones: seguro que todo ha resultado enriquecedor en este foro.
Con este breve texto me despedí de facebook a las 00:00
horas del 31 de diciembre.
Por si algunos seguidores de los debates que allá
mantenía tiene interés en mis argumentos, cito aquí una intervención mía en la
que hacía una síntesis de los más discutidos en estos últimos meses.
Habida cuenta del aumento del interés por mis intervenciones,
argumentos o planteamientos -un interés que no me merezco puesto que soy un
mero intermediario que difunde la información crítica, no manipulada por el
poder o al servicio de intereses de los de Arriba- se me ocurre resumir aquí
algunas cuestiones por las que constantemente se me interpela para evitar que
los visitantes de este foro se cansen leyendo una y otra vez las mismas
preguntas a las que obviamente voy a dar las mismas respuestas -mientras no se
presente nueva información que pueda yo analizar, contrastar y reflexionar- y
para evitarme yo mismo un tiempo que, la verdad, algunos se merecen bien poco.
Ruego pues encarecidamente que antes de plantearme -en
los múltiples hilos que aquí vamos abriendo- las mismas preguntas de siempre,
se consulte este pequeño resumen, que incluirá también enlaces para ampliar y
contextualizar. Ni que decir tiene que continuaré manteniendo mi disposición a
debatir todo aquello que se quiera debatir y que no esté respondido aquí,
siempre que no sean -como ya he advertido muchas veces- cuestiones privadas,
intentos de descalificación, injurias varias o excursiones a los cerros de
Úbeda, practicadas todas ellas con demasiada profusión por algunos de nuestros
visitantes y que se responden y descalifican por sí mismas.
SALUD Y SISTEMA SANITARIO
Quienes piden que justifiquemos que tal o cual terapia
natural entre a formar parte del Sistema Sanitario, lo hacen desde un enfoque
ya dado. Su defensa ciega del modelo médico moderno los sitúa en un
enfrentamiento entre medicina moderna y terapias naturales. Yo no contemplo las
cosas así, ni siquiera creo que lo más importante sea hablar de medicinas o
terapias. En primer lugar hay que hablar de salud y de cómo cultivar
nuestra capacidad para responsabilizarnos de ella y tomar nuestras propias
decisiones.
En este sentido, el análisis previo desborda el terreno
de lo científico-médico y entra en terreno cultural, social, político,
económico. Para conseguir el primer objetivo, es preciso conocer las
relaciones de poder que actúan en el campo de la salud y la enfermedad y
actuar para desmontarlas o al menos oponerse a ellas en lo posible.
A partir de ahí, podemos hablar de sistema de salud o
sistema sanitario, que en estos momentos se encuentra bajo la influencia o
el control de esos poderes: económico, político, académico, que condicionan su
concepción, su funcionamiento y el concepto de salud que se le traslada a la
mayoría.
Quien sea capaz de juzgarlo sin prejuicios, encontrará
que en mayor o menor medida, estos sistemas están fracasando a la hora de
ayudar a la gente. Y desde luego, un cambio de políticas sanitarias que de
verdad atendiera las necesidades de la gente debería comenzar por una
evaluación independiente de su funcionamiento para poner en evidencia los errores
a corregir.
Por mi parte, yo creo urgente y de extrema necesidad
cambiar ese enfoque. Es decir, parto de la idea de que los sistemas
sanitarios necesitan un cambio radical que debe empezar por el concepto de
salud. Ese principio debería ser el que determine los cambios que hagamos a
todos los niveles: de contenido, organizativos, de gestión... teniendo
como meta un sistema de salud público, holístico y autogestionado.
En estos momentos, los sistemas sanitarios y todo el
modelo médico dentro y fuera de él, parten de un enfoque de la salud que se
caracteriza por un reduccionismo mecanicista, una concepción estática de
la salud-enfermedad como cosas opuestas y en consecuencia una visión
belicista de combate a la enfermedad para conseguir la salud, en
particular a partir de la imposición sin pruebas de la Teoría Microbiana que
desplaza radicalmente la prevención de los hábitos de salud a las vacunaciones
masivas y el tratamiento de las enfermedades a la guerra química contra los
microbios, todo ello con gravísimas consecuencias a múltiples niveles.
Si cambiamos ese enfoque por uno dinámico en el que salud
y enfermedad son elementos de un mismo proceso de equilibrio y lo que llamamos
enfermedad la señal de procesos biológicos de reequilibrio de nuestro
ecosistema interno, y si además abrimos la mirada a todos los aspectos
implicados trascendiendo lo meramente fisiológico, es evidente que diseñaremos
nuestros sistemas sanitarios de otro modo: buscaremos aquellos procedimientos,
disciplinas, recursos, técnicas, terapias o medicinas que nos ayuden a
conseguir ese objetivo. Y entonces, cobrarán más importancia las ciencias de la
salud que se centran en los hábitos de vida saludables y las medicinas que
actúen a favor de la naturaleza, situando en un segundo plano, es decir, como
recursos alternativos, aquellas que actúen contra los procesos naturales y que
puedan ser útiles en determinadas circunstancias.
De este modo, teniendo claro el objetivo a conseguir,
será más factible ponerse a pensar en los medios para conseguirlos. No se
trata pues de decidir qué cosa debemos incluir en el actual sistema, sino qué
concepto de salud tenemos para saber qué cosas sirven a nuestro objetivo y
cuáles no, y con las que valen, construir un sistema radicalmente
distinto.
Que los estudios clínicos son una herramienta valiosa
sería absurdo negarlo; que son la única herramienta admisible no es que sea
absurdo o deshonesto, que también, sino que iría marcadamente en contra de los
objetivos propuestos.
No propongo, por tanto, desterrar los estudios clínicos
habituales, propongo gestionarlos de modo que se garantice su independencia y
situarlos en el lugar que le correspondan en función de su utilidad precisa y
limitada, y por tanto, sumándolos a otras herramientas que nos permitan
complementar nuestro conocimiento para poder valorar y tomar decisiones
adecuadas en función de nuestro objetivo que, como hemos dicho, no es reduccionista
sino global y por tanto debe proceder de una globalidad de
recursos derivados del conocimiento empírico, el razonamiento, la lógica,
el saber social acumulado, la filosofía, la capacidad de síntesis entre la
experiencia y lo racional, la memoria, la intuición... todo ello con la
participación de todos los implicados y complementado con las medidas
necesarias para contrarrestar la influencia y el control que actualmente
ejercen los poderes políticos, económico y académicos.
TEORÍA MICROBIANA/ VACUNAS
Comencé a buscar información sobre este tema a partir del
nacimiento de mi hija -que ahora tiene 24 años. En ese tiempo he leído,
intercambiado experiencias con padres críticos, entrevistado a especialistas y
analizado numerosas fuentes, en particular durante los trabajos preparatorios
del libro escrito a medias con el Dr. Enric Costa. En este momento, mi posición
al respecto es la siguiente:
-- Las vacunas no tienen sentido bio-lógico, es
decir, no se corresponden con la lógica de los procesos vitales.
-- Las vacunas no tienen base teórica, puesto que no
existe una teoría que explique de tal modo el origen de las enfermedades que
las vacunas puedan cumplir un papel preventivo.
-- Como consecuencia de ello, podemos afirmar que las
vacunas no han erradicado enfermedades ni pueden proteger contra
ellas.
-- Más bien sucede lo contrario: son peligrosas para
la salud y la vida y responsables con toda probabilidad de una multitud de
nuevas enfermedades graves, crónicas y degenerativas.
-- Las vacunas se mantienen gracias al enorme poder
de sus fabricantes y el abandono de nuestra salud en manos ajenas y no por
motivos científico-médicos.
No todos los argumentos son ni pueden ser estudios
clínicos como algunos pretenden. Hablamos de un tema complejo que exige
argumentos complejos y pluridisciplinares: argumentos históricos, argumentos
lógicos, argumentos epistemológicos, datos estadísticos, conocimientos de
biología, de genética, de fisiología, de neurología, de bioquímica, de
medicina... En nuestro libro...
... explicamos que las vacunas no tienen sentido
bio-lógico explicando los entresijos de la vida desde el nuevo paradigma que se
abre paso en biología y que explica de otro modo nuestra relación con los
microbios o las mal llamadas funciones inmunitarias o las mal llamadas
enfermedades;
... explicamos que las vacunas no tienen base teórica
argumentando que la teoría microbiana es incorrecta;
... explicamos que las vacunas no pueden ser sino
perjudiciales porque su lógica de funcionamiento no se corresponde con la
lógica de la vida, de los procesos vitales, de los procesos de reequilibrio que
tienen lugar en el medio interno y que pueden explicarse desde un enfoque
microecológico;
... y explicamos que a pesar de todo ello, las vacunas se
mantienen por razones de poder, y argumentamos esta conclusión mediante
análisis sociológicos, históricos, filosóficos, económicos, cifras, datos,
investigación periodística, análisis crítico, reflexión rigurosa, independencia
de todo interés que no sea el interés por ayudar a la gente.
Hasta el momento, ninguno de los visitantes que han
afirmado que la Teoría Microbiana es correcta ha sido capaz de aportar las
pruebas que les he solicitado.
Para una exposición completa del análisis crítico llevado
a cabo por el Dr. Costa y por mí, ver Vacunas: una reflexión crítica (referencia
completa más abajo). Presentaciones del libro (videos).
MONTAJE SIDA
Comencé a investigar este tema en 1994. Desde el
principio tuve claro que el "SIDA" es un dispositivo de poder y
que por tanto no puede comprenderse en toda su complejidad si lo analizamos
desde el ángulo científico-médico.
El Montaje SIDA -como algunos hemos decidido llamarlo a
partir del conocimiento que hemos adquirido sobre el tema durante muchos años-
es muy complejo, y abarca muchos terrenos en los que están implicadas muchas
disciplinas: los aspectos científico-médicos son sin duda relevantes, pero
muchos no los consideramos los más importantes y decisivos; hay otros elementos
que apuntan a aspectos sociales, políticos, económicos, morales, religiosos,
filosóficos, mediáticos, legales, laborales, emocionales... sin los cuales no
es posible entender ese montaje y, desde luego, nadie puede reunir ese cúmulo
de conocimientos y experiencias por sí solo, de modo que la mayoría hemos
dedicado mucho tiempo y esfuerzo a aprender, a analizar críticamente, a
reflexionar y compartir.
En mi caso, llevo implicado en este tema desde 1994,
sobre todo como activista y periodista, y desde entonces he leído cientos de
artículos científicos, una multitud de material periodístico, legal e
informativo, he asistido a cursos y entrevistado a médicos, inmunólogos,
biólogos, microbiólogos, genetistas, abogados, periodistas, afectados,
activistas... todo ello me ha llevado a la posición en la que estoy, una
posición que se sostiene en la valoración crítica y honesta de todo ese
material y que puede cambiar si se me aportan otros materiales, otras
evidencias, otras pruebas, otros argumentos... cosa que por ahora no ha
ocurrido.
Sintetizo a continuación los elementos más importantes
que los críticos del Montaje SIDA hemos ido elaborando en el terreno
científico-médico (que, como digo, no es el único ni el más trascendente):
1. El “SIDA” no es una nueva enfermedad infecto-contagiosa.
2. El “VIH” no ha sido aislado, fotografiado,
caracterizado ni secuenciado.
3. No se ha establecido el mecanismo mediante el que el
“VIH” destruye los Linfocitos T4 ni cómo esto produce inmunodeficiencia.
4. Los tests no cumplen los mínimos requisitos para ser
fiables.
5. Los “recuentos de defensas” no tienen significado
biológico o clínico.
6. Las “mediciones de carga viral de VIH” son un
artefacto tecnológico sin reflejo real.
7. Los “tratamientos antivirales” son tóxicos causantes
de malformaciones, graves problemas de salud y muertes.
8. Las previsiones epidemiológicas han resultado
fallidas.
Por el momento ningún visitante que haya afirmado confiar
en la versión oficial del SIDA ha sido capaz de aportar pruebas de ninguna de
las afirmaciones oficiales. Cosa que por otro lado viene sucediendo cada
vez que los críticos las solicitan, incluso cuando un Premio Nobel de Química
las solicitó al propio Dr. Monganier. Tan solo un visitante contestó a algunos
argumentos parciales míos sobre el supuesto aislamiento del VIH, contestación
que tuvo su correspondiente respuesta pormenorizada y que aún permanece sin
réplica.
Para una exposición más completa de todos los aspectos
implicados en el Montaje SIDA, referencias, bibliografía, enlaces, entrevistas
y descripción de numerosas acciones de reivindicación llevadas a cabo, ver La
Sanidad contra la Salud (referencia completa más abajo).
MEDICINA CONVENCIONAL Y LAS OTRAS MEDICINAS
-- Denomino a la medicina que domina la mayoría de los
sistemas sanitarios actuales “medicina moderna occidental”. A veces
complemento con una serie de calificativos —cuya justificación sería muy largo
de detallar aquí: “reduccionista”, “mecanicista”, “industrializada”,
“belicista”...
-- Denomino “medicinas tradicionales” o
“ciencias de salud tradicionales” exclusivamente a las que se inscriben dentro
de una tradición, en el sentido estricto del término, como la medicina china,
la ayurvédica y otras similares.
-- Al resto de las medicinas, terapias, técnicas,
disciplinas... las denomino por su nombre propio: homeopatía, naturopatía,
terapia craneo-sacral...
-- Utilizo las denominaciones genéricas “medicinas
naturales” o “terapias naturales” para referirme a cualquier medicina o
terapia —independientemente de su antigüedad, origen, metodología específica—
que cumpla la condición de actuar a favor de la naturaleza, es decir, de
favorecer los procesos naturales, por contraposición a medicinas o técnicas que
actúan en contra de la naturaleza, es decir, bloqueando, reduciendo o
estorbando los procesos naturales. Conste a modo de aclaración que esta
división no implica un criterio absoluto de elección ante situaciones concretas.
-- Entiendo que una cosa “funciona” cuando cumple
con el objetivo para el que se concibió. Obviamente, cada cosa debe ser
juzgada en función de ese objetivo y no de los objetivos de otra cosa, menos
aún si es cualitativamente distinta o peor aún, opuesta.
HOMEOPATÍA
Otro tema que obsesiona especialmente a los ultras de la
medicina moderna es el de la Homeopatía. El argumentario que repiten una y otra
vez incluye atribuir las curaciones al efecto placebo, acusaciones de vender
agua con azúcar puesto que en los preparados homeopáticos no hay materia alguna
y, ya los más duros, entran directos al insulto y la descalificación acusando a
quienes la practican de estafadores.
Invariablemente, estas acusaciones se hacen apoyándose en
el Método Científico que, para muchos, en particular para los fanáticos
cientificistas que pretenden que el mundo empieza y acaba en lo meramente
material y cuantificable, es la única herramienta válida para conocer,
analizar, valorar o juzgar, y por tanto, el único modo de establecer lo que
“funciona” y lo que “no funciona”, frontera esta que según ellos delimita lo
que es “medicina” y lo que no lo es.
Es lógico pensar que una herramienta concebida para
actuar en un estrecho ámbito no puede utilizarse para conocer, valorar o medir
cosas pertenecientes a otros ámbitos. Quienes se empeñen en hacerlo están
condenados a falsear los resultados y si lo hacen a sabiendas simplemente
estarán mintiendo y manipulando. A pesar de esto, hay quien da un paso más y
afirma que todo aquello que su herramienta no puede conocer no existe, un
ejercicio de totalitarismo intelectual, absurdo racional, mediocridad
científica y deshonestidad manifiesta.
Ahora bien, aunque ciertas medicinas, ciencias de la
salud y terapias tradicionales precisamente por su carácter holístico, no
puedan ser medidas o valoradas mediante una herramienta que se limita un
estrecho campo de acción, el método científico puede al menos abordar una
parte de su funcionamiento y responder a las preguntas que en el terreno
puramente material o fisiológico se planteen.
Aunque la homeopatía no es una medicina tradicional sí
que comparte con ellas un enfoque holístico de la salud, y es por
ello un ejemplo de lo que venimos explicando. El método científico —a menos que
evolucione y se abra a territorios que ahora no aceptan la mayoría de los
científicos— no puede estudiarla en su totalidad, pero puede responder a las
descalificaciones usuales de sus críticos, en particular a la que considera que
en los remedios homeopáticos no hay materia y por tanto sus efectos se deben al
efecto placebo.
CIENCIA Y MÉTODO CIENTÍFICO
No cabe duda que la ciencia ocupa un lugar relevante en
el mundo moderno: gran parte de lo que los habitantes de las zonas
privilegiadas de ese mundo considera valioso se apoya en la ciencia. La ciencia
ha permitido un enorme progreso material especialmente en lo referido a todo
aquello que tenga utilidad práctica.
Al mismo tiempo, una inmensa mayoría de la población, que
no conoce en profundidad las diversas ramas de la ciencia, no solo acepta sin
rechistar ese lugar de privilegio para una disciplina que ignora, sino que
precisamente esa ignorancia hace que depositen en ella una fe ciega facilitando
así que el lenguaje científico se haya convertido en una especie de
metalenguaje que funciona como un legitimador de la verdad, y ello a pesar de
que ni desde fuera ni desde dentro de la propia ciencia se considera que esta
pueda servir para establecer verdades.
Pero lo más grave es que esa función de legitimación
es utilizada por grupos privilegiados a diferentes niveles dentro de las
complejas relaciones de poder que caracterizan nuestras sociedades con la
finalidad de imponer su discurso, sus intereses y su visión del mundo, y en
definitiva para ejercer el poder y mantenerse en sus posiciones de privilegio.
Creo que para un movimiento socio-político como Podemos,
que aspira a la justicia social, a promover los cambios necesarios para
conseguirla, a despertar de alguna forma a esa enorme cantidad de gente que en
estos momentos padece una indolencia brutal que paraliza las transformaciones y
los anhelos de justicia, para una fuerza así, el análisis crítico de las
relaciones de poder, de su utilización del lenguaje y las herramientas de la
ciencia y de su capacidad de manipulación y control de instituciones y grupos
sociales en terrenos tan sensibles como el de la salud, la protección del medio
o la educación, es una obligación ética irrenunciable.
Desde ese punto de vista creo que debería ser bienvenido
cualquier debate destinado a favorecer ese análisis crítico libre de
prejuicios, ideas preconcebidas, actitudes de rechazo o ceguera intelectual y
especialmente de planteamientos y enfoques que favorece directa o
indirectamente, consciente o inconscientemente el dominio de esos grupos
privilegiados.
Mi respeto por la ciencia incluye como complemento
obligado el combate a los científicistas que en mis artículos y libros he
denominado "fundamentalistas científicos" y otros denominan
"pseudoescépticos", y que con tanto fervor acuden a este foro no
siempre con sanas intenciones aunque casi siempre con tal grado de torpeza y
zafiedad que casi no hay que esforzarse para ponerlos en su sitio ya que ellos
mismos se encargan de ponerse constantemente en ridículo dejando al descubierto
la mala fe de la mayoría de sus intervenciones, la enorme frustración que
acumulan (quizá porque no consiguen rentabilizar sus ataques) y lo más
importante la falta total de argumentos y evidencias que respalden sus
furibundos intentos de censura inquisitorial propia de momentos históricos que
todos quisiéramos olvidar.
En el caso particular de este foro, parece evidente que
una parte de sus visitantes se encuadran en este grupo, bien de modo formal y
autodeclarado, bien porque sus actitudes, su argumentario y sus tácticas
reproducen habitualmente las señas de identidad de estos grupúsculos: defensa
explícita o soterrada o inconsciente de los intereses del Poder... exigen pruebas
pero no las presentan, si se les aporta evidencias atacan a quien las aporta o
al medio en el que se publican, si se les arrincona poniéndolos en evidencia
declaran sin la menor vergüenza que quienes les pedimos pruebas no somos
capaces de entenderlas y eso los dispensa, y, como aderezo habitual y en
generosas cantidades: intentos de descalificación, ataques personales,
difamación, injurias de todo tipo -especialmente las que aluden a un supuesto
interés económico-, complejo de superioridad, agresividad, criminalización del
diferente, desprecio por el crítico y defensa de lo establecido, mesianismo,
discurso paranoide, fanatismo, etnocentrismo científico y fascismo subyacente.
Más información sobre fundamentalismo científico:
Contra los extremistas científicos (Salud y Poder).
Fundamentalistas científicos contra el pensamiento crítico (Discovery DSalud).
Fundamentalismo científico como pseudociencia (una
reflexión del Biólogo y científico titular del CSIC Emilio Cervantes).
[BREVE ACLARACIÓN SOBRE CONFLICTOS DE INTERESES]
Mi interés fundamental en el terreno de la salud es la
búsqueda de la verdad y el conocimiento para compartirlo y ayudar a que todos
podamos cultivar nuestra propia salud sin depender de otros, especialmente si
esos otros forman parte de herramientas de dominación al servicio de los de
Arriba. Toda otra cuestión que pueda entrar en conflicto con esta queda
automáticamente fuera de consideración. No soy médico, ni terapeuta, ni
curandero, ni pretendo serlo. Me gano y me he ganado siempre el pan con el
sudor de mi frente, en los últimos treinta años como maestro, y la inmensa
mayoría del trabajo que hago en este terreno es voluntario.
Llevo años dando
charlas, conferencias, talleres, cursos y presentaciones de libros; solo
recuerdo haber cobrado por ello durante mi participación en unas jornadas
organizadas por la Facultad de Filosofía de la Universidad de Sevilla ocasión en
que se me abonó el estipendio habitual estipulado por la universidad. Mis
colaboraciones remuneradas en varias revistas divulgativas son absolutamente
incondicionales: esto quiere decir que jamás he recibido pago, privilegio o
ventaja alguna por escribir algo que no fuera aquello que en conciencia
decidiera escribir como fruto de mi trabajo de investigación que me esfuerzo
porque sea lo más riguroso y honesto posible.
-- El rapto de Higea. Mecanismos de poder en el
terreno de la salud y la enfermedad. Barcelona, Virus, 2009.
-- Il potere occulto dell'industria della sanitá. La
veritá sui meccanismi di controllo delle case farmaceutiche. Cesena,
Macroedizioni, 2013.
-- La sanidad contra la salud. Una mirada global
para la autogestión. Madrid, iediciones, 2015.
-- Vacunas: una revisión crítica a partir de la
historia de la medicina y los últimos descubrimientos de la biología (co-autor:
Dr. Enric Costa). Madrid, iediciones, 2016.
-- Vacunes: una reflexió cfritica a partir de la
història de la Medicina i dels darrers descobriments en Biologia (co-autor:
Dr. Enric Costa). Barcelona, Llibres de l'Index, 2016.
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